La gestión del presidente Nicolás Maduro alcanzó el mayo una aprobación de 23%, según una encuesta, lo que lo coloca en una situación de riesgo ante la posibilidad de ir este año a un referendo revocatorio, reseña Associated Press.
En los últimos meses el registro de aprobación se ha mantenido dentro de un rango entre 23% y 26%, lo que revela un estancamiento en la popularidad del mandatario que se ha visto golpeada por una compleja crisis dominada por una desbordada inflación de tres dígitos y graves problemas de escasez de alimentos, medicinas y otros bienes básicos
Un estudio de la firma Datanálisis, que es una de las principales encuestadoras del país, señala que la aprobación de gestión de Maduro se ubicó para mayo en 23%, indicó el director de la empresa, Luis Vicente León, a la emisora local Unión Radio.
El estudio de Datanálisis reveló que la coalición opositora de la Mesa de la Unidad Democrática y algunas de sus principales figuras como el dirigente encarcelado Leopoldo López, el ex candidato presidencial Henrique Capriles, el presidente del Congreso, Henry Ramos Allup, y el gobernador del estado central de Lara, Henri Falcón, han logrado capitalizar el descontento que existe contra el gobierno.
León expresó que la popularidad de López, Capriles, Ramos Allup y Falcón supera en “25 puntos porcentuales” a la de Maduro.
La encuesta se realizó en mayo entre unas 1.300 personas a nivel nacional y tiene un margen de error de 2,7%, precisó el analista.
Las dificultades económicas han desatado en los últimos meses crecientes protestas callejeras y saqueos de comercios, según registros de la organización Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.
León indico a The Associated Press que a pesar del empeoramiento de la crisis económica eso no ha tenido mayor impacto en la popularidad de Maduro debido a que el oficialismo cuenta con una fuerte base de apoyo. “La fuerza chavista tiene una base que no penetra para abajo”, agregó.
Ante la posibilidad de un eventual referendo revocatorio para este año, el analista dijo que ese proceso representa un riesgo para Maduro debido a que el respaldo de 23% “no es suficiente para ganar una elección”.
La alianza opositora está a la espera que el Consejo Nacional Electoral culmine la revisión de las validaciones de firmas que realizaron a finales del mes pasado 409.313 opositores para activar una nueva fase del proceso del referendo.
La oposición insiste en que la consulta puede realizarse este año, pero Maduro descartó esa posibilidad. El mandatario denunció que la alianza opositora cometió un “fraude” en la recolección de firmas de abril pasado.