Tras el envío de detenidos durante protestas por comida en los estados Sucre y Delta Amacuro a la Penitenciaría General de Venezuela (PGV) en el estado Guárico, el abogado y defensor de Derechos Humanos (DDHH) Rafael Narváez aseveró que este centro de reclusión es “un campo de concentración donde recluyen a quienes protestan por hambre”.
Nota de prensa
Narváez fustigó que se envíe a esta cárcel, sin investigaciones ni determinación de culpabilidades, a quienes protestan para exigir el derecho a la alimentación. Señaló que 17 personas del estado Sucre y otros 29, capturados durante las protestas en Tucupita, fueron llevados al penal, se le raparon los cabellos y se les colocó un uniforme amarillo, sin que exista un debido proceso. “Se les violentan sus derechos y esto es solo una lectura de la represión a quienes protestan por hambre” señaló.
Con esto, el también ex parlamentario indicó que el Gobierno nacional institucionalizó la falta de alimentos y fomenta un “apartheid político” a través de la entrega de productos alimenticios por parte de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap). Señaló que las bolsas con comida llegan a gobernaciones y alcaldías oficialistas y solo son entregadas a quienes pertenecen a Consejos Comunales o al Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv). Catalogó a la actual gerencia gubernamental como “indolente” al aseverar que no realiza acciones efectivas ante el sufrimiento de venezolanos para poder alimentarse.
De igual forma, denunció que en zonas como la guajira venezolana, las bolsas de alimentación no llegan a los indígenas, quienes “mueren de hambre” tras el consumo de agua de auyama en sustitución de otros componentes importantes de la dieta diaria, a los cuales no tienen acceso desde hace meses; al respecto, emplazó a los funcionarios del Ministerio de Asuntos Indígenas a acudir al sitio y verificar la situación. Asimismo, resaltó el caso de las 500 mujeres tachirenses que pasaron la frontera de Venezuela hacia Colombia y el cerco interpuesto por la Guardia Nacional (GN) solo para adquirir alimentos y medicinas.
Indicó que la situación amerita que el Gobierno nacional acepte ayuda humanitaria de países hermanos, quienes han ofrecido el envío de alimentos y medicinas, ya que la situación de crisis del país ha ocasionado la muerte de adultos e infantes por falta de medicamentos, tanto para enfermedades crónicas como para padecimientos regulares.