La FAO es la organización de las Naciones Unidas que se ocupa de la alimentación y la agricultura a nivel mundial. En los pasados cuatro meses les he enviado cartas a la oficina central en Roma, a la oficina de Washington y a la Oficina de Caracas, sin obtener respuesta alguna. Le envié dos mensajes al Sr. Bernardo Kliksberg, quien es asesor de este organismo para América Latina, sin que este señor tuviese la elemental cortesía de un acuse de recibo.
Por Gustavo Coronel
¿De qué se trataban mis cartas? De la indigna, parcializada y poco profesional conducta de la representación de las FAO en Caracas, a cargo del Sr. Marcelo Resende desde hace varios años. Para la representación de las FAO en Venezuela el gobierno de Hugo Chávez, primero, y ahora de Nicolás Maduro, han sido un ejemplo de eficiencia en obtener para el país soberanía alimentaria y en establecer eficientes sistemas de distribución de alimentos para la población venezolana. La prensa ha citado al Sr. Resende diciendo lo siguiente en Marzo de este año, ver: http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=20944 : “Marcelo Resende, delegado de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), felicitó al gobierno venezolano por crear “el mejor sistema popular de distribución de alimentos”. Resende manifestó en una reunión con el ministro de Alimentación Rodolfo Marco Torres: “Felicito al pueblo de Venezuela y su gobierno por crear la mejor red pública para distribuir alimentos y también los felicito por lograr una activa participación y organización social de todo su pueblo”. En Abril, 2015, este personaje agregó que Venezuela “era un ejemplo de políticas públicas en materia de alimentación” y dijo que en “Venezuela no existía hambre gracias a los esfuerzos del gobierno”, celebrando la existencia de MERCAL, PDVAL y los Abastos Bicentenarios. Estas declaraciones han sido hechas en abierto contraste con la realidad venezolana, ejemplificada por los saqueos a mercados, el espectáculo de las largas colas para adquirir lo poco que pueda encontrarse en los mercados y la reciente estampida de miles de venezolanos hacia Colombia a comprar comida cuando el régimen se digna abrir la frontera cerrada desde hace largos meses. En otro escrito muy elogioso para el gobierno, ver: http://www.fao.org/americas/noticias/ver/en/c/283757/ el Sr. Resende, representante de las FAO en Caracas dice (mi traducción): “No solamente Venezuela ha logrado cumplir con las metas del Milenio en materia alimenticia sino que sido capaz de eliminar completamente el hambre en la región gracias a su cooperación internacional… Venezuela y las FAO creen firmemente en la meta de cero hambre”. Agregó Resende que la cooperación con el gobierno de Venezuela está basada en el Plan de Acción de Hugo Chávez para erradicar el hambre en la región.
El gobierno de Chávez y de Maduro le dio a la representación de las FAO en Caracas doce millones de dólares para este programa, lo cual explica los elogios desmesurados de la representación de ese organismo hacia el régimen venezolano. Ello le ha permitido a la prensa mercenaria del régimen hacer creer que no hay problemas de alimentación en el país. Venezuelanalyisis, pasquín virtual del gobierno en inglés reprodujo hace pocos días un escrito que menciona la complaciente melosidad de las FAO con el régimen (mi traducción): “La distribución de alimentos ha permitido la disponibilidad de renglones alimenticios básicos a precios subsidiados….estos esfuerzos han hecho posible logros históricos en seguridad alimentaria, de acuerdo a lo que testimonia las FAO”, ver : https://venezuelanalysis.com/analysis/12084 .
La FAO en Venezuela se ha convertido en cómplice del régimen político que ha arruinado al país. Sus representantes son sordos a las protestas ciudadanas, son ciegos ante la tragedia alimentaria que sufre el país. ¿Es solo una coincidencia que la oficina en Caracas haya recibido tanto dinero del gobierno?
Este organismo olvida que existe para el beneficio de los pueblos, no de los gobiernos. Y que sus representantes y asesores están en la obligación de responder los enjuiciamientos documentados que se les hacen. De lo contrario se convierten en victimarios de la sociedad, en cómplices de la tragedia venezolana.
Gustavo Coronel es escritor y activista por los derechos civiles. Ex director de Pdvsa