La producción de autos en Venezuela se hundió un 85,81 por ciento en el primer semestre del 2016, según estadísticas del gremio que agrupa a los principales fabricantes de vehículos en el país petrolero.
Reuters
Agobiados por las distorsiones generadas por el control de cambios que rige en Venezuela y en medio de una fuerte escasez de repuestos y una economía en recesión, las firmas extranjeras afincadas en el país sudamericano apenas produjeron 1.550 unidades entre enero y junio de este año, comparadas con las 10.922 del mismo periodo del 2015.
La Cámara Automotriz de Venezuela (Cavenez) agrupa, entre otras, a Fiat Chrysler; Ford; General Motors; Toyota; Iveco, de la italiana CNH Industrial; Mack, de la sueca Volvo, y la japonesa Mitsubishi, las cuales trabajan al mínimo por los retrasos en la asignación de divisas para importar suministros.
La mayoría de las firmas asociadas a Cavenez no produjo ningún vehículo en el primer semestre del año, en una muestra de la crisis de la industria automotriz venezolana, calificada por los miembros del sector como la peor en la historia del país.
El Gobierno socialista de Nicolás Maduro ha sostenido diversas reuniones con los representantes del sector para solventar la crisis, pero los resultados no se han difundido.
Las venta de autos nuevos fabricados en el país también se contrajo en la primera mitad del 2016, al caer un 85,4 por ciento interanual a apenas 1.593 unidades comercializadas.
Sin embargo, en el mismo periodo del año, la venta de autos importados creció un 79 por ciento, impulsada por los despachos de Ford, que, como algunas otras marcas, comercializa sus vehículos en dólares.