Luego del pronunciamiento de Tibisay Lucena, rectora principal del Consejo Nacional Electoral (CNE), Juan Pablo Guanipa, diputado a la Asamblea Nacional, aseguró que el revocatorio no sólo está más vivo que nunca, sino que plantea un “nuevo reto” que será posible con la organización de toda la sociedad venezolana esperanzada de un cambio de gobierno.
Nota de prensa
Para Guanipa, la desesperanza es un juego del gobierno de Maduro como única carta que le queda al PSUV, al no tener respaldo popular. “Venezuela debe saber que lo estamos logrando. El revocatorio sigue vivo, a pesar de toda la trampa que han hecho, desde el CNE no pudieron echar para atrás el referendo. Se nos ha planteado un nuevo reto y es que si será en octubre la recolección de 20%, pues con presión popular no sólo lograremos el 20% sino que en esos tres días lograremos el 100%, para demostrar que es todo un país que quiere revocar a Nicolás Maduro, la figura más nefasta que ha pasado por la presidencia.”
Según el parlamentario, la presión popular de calle urge ahora como manifestación de voluntad de cambio. “Aquí no habrá Tibisay que valga, aquí no habrá CNE que retrase, si hay un pueblo organizado que se movilice a exigirles que hagan su trabajo. Los niños que están muriendo de hambre a nivel nacional no pueden esperar que las rectoras sigan estirando los lapsos. Exigimos celeridad ante una crisis que está matando inocentes, que está asfixiando a las familias venezolanas.”
Guanipa aseguró que es “insólito” que el CNE insista en darle un carácter superlativo a los derechos políticos de Nicolás Maduro, cuando hay millones de venezolanos “que pierden la vida en medio de la indolencia del sistema”. “El derecho que tenía Nicolás Maduro de mandar como presidente electo, lo perdió cuando defraudó al pueblo venezolano. Ahora le corresponde al pueblo recuperar ese voto de confianza perdido y entregar las riendas del país a un presidente que recupere a una moribunda Venezuela.”
“Cuando creemos que Tibisay Lucena no puede ser más irresponsable, sale nuevamente a demostrar lo contrario. El pronunciamiento del día de hoy no fue más que un intento desesperado por lavarse la cara ante la opinión pública porque sabe que los ojos del mundo están puestos sobre las cuatro rectoras y su incompetencia” finalizó.