Cuatro homicidios se perpetraron entre la tarde y noche de este martes, posiblemente en un lapso de diez horas, en distintos sectores de la entidad tachirense, para los cuales los asesinos utilizaron armas de fuego y tuvieron varios móviles, publica La Nación.
No les bastó robarlo, regresaron a matarlo
El primero de los asesinatos, reportado el martes en la tarde, fue el del encargado de una finca de El Tambo, vía al municipio Córdoba, a quien tres sujetos jóvenes, vecinos del sector, lo mataron de un tiro de escopeta frente a su esposa y un hijo, de entre 10 y 12 años.
Aproximadamente a las 4.30 de tarde se dio el alerta entre las autoridades, en el sentido de de que una persona había sido herida en la finca La Esperanza, por lo que hasta allá se movilizó una comisión de rescatistas de Protección Civil Torbes, en la unidad Alfa 3.
Sin embargo, antes de llegar al lugar se encontraron de frente con un vehículo rústico cuyos ocupantes, al notar que se trataba de una ambulancia, les hicieron señas para que se detuvieran, pues allí trasladaban al herido.
Desafortunadamente, cuando los paramédicos revisaron a la víctima, que iba en el puesto del copiloto, determinaron que estaba sin signos vitales. Explicaron que en vista de que la finca donde ocurrió el hecho está tan distanciada, en el vehículo del patrón intentaron ganar tiempo, pero el hombre murió en el trayecto, y su cadáver permaneció allí hasta el arribo del Cicpc.
Se trataba de José Teodoro Vargas Mora, de 54 años de edad, quien tenía varios años encargado de la finca, donde además se dedicaba a la siembra y ordeño de las vacas. Allí vivía con su esposa y varios de sus siete hijos.
Según testigos, los asesinos de Vargas habían ingresado a la propiedad en repetidas oportunidades y robado cuanto conseguían, como una guadaña y una carretilla; incluso el domingo sustrajeron un saco de yuca, situación que ya tenía molesto al obrero, quien tenía la intención de denunciar al trío de hampones ante las autoridades.
De hecho, no solo se cree que ante esta posible amenaza fue que los criminales regresaron a la finca para eliminar al vecino, sino que además pretendían cometer otro robo. Por eso es que al llegar hubo una discusión entre la víctima y sus victimarios durante la cual sometieron al obrero, quien estaba desarmado. A la esposa la lanzaron al piso y luego, delante de uno de los hijos de ambos, le dispararon al hombre y huyeron.
Aun así, no fue mucho el tiempo que estuvieron en fuga, pues al conocer del crimen, el Cicpc se activó y aprehendió a dos de los responsables en la llamada “picadora”, a los que les incautaron el arma incriminada; mientras que el tercer implicado sigue prófugo, pero plenamente identificado.
Asesinado por supuesto problema de drogas
El segundo homicidio del martes tuvo lugar en la parte alta de la ciudad, frente a un local de la avenida Los Agustinos, Pueblo Nuevo, poco después de las 9 de la noche. Reportaron que en plena vía pública, un joven fue herido de un balazo en la cabeza y que de emergencia lo trasladaron a una clínica privada cercana.
La condición del herido era grave y se decidió remitirlo de emergencia al Hospital Central, aunque para esto no hubo tiempo, pues el muchacho falleció. Se corrieron rumores sobre el móvil del asesinato, como que se había resistido a un atraco, pero minutos después dos jóvenes que acompañaban al fallecido explicaron a las autoridades qué pasó en realidad.
Identificaron a la víctima como Jetzael Alejandro Becerra Ruiz, de 20 años, de quien no suministraron más datos, solo que vivía alquilado en una residencia de la calle 3 del barrio El Lobo. Añadieron que había varios jóvenes reunidos frente a dicho inmueble y de repente surgió una discusión entre la víctima y uno de ellos, supuestamente por el pago de una deuda de drogas, el cual habría sacado a relucir un arma de fuego que disparó contra el joven y luego huyó.
El Cicpc asumió las investigaciones y detuvo preventivamente a los jóvenes testigos del crimen, para someterlos a interrogatorio.
Hallan a dos desconocidos con tiros en la cabeza
Aunque se presume que el doble asesinato de dos hombres se perpetró durante la noche de este lunes, no fue sino hasta las 6:30 de la mañana de ayer cuando hicieron el hallazgo de sus cadáveres.
A ambos les apreciaron tiros en la cabeza. Ninguno fue identificado, pero aseguraron que eran relativamente jóvenes. Los asesinos les quitaron la vida a escasos dos metros de la carretera principal del sector Caternica, aproximadamente a 150 metros de la escuela Fe y Alegría, linderos de la hacienda Ibarra y frente a la finca La Gran Sabana, en el municipio Independencia.
Los vecinos manifestaron que no eran conocidos del sector. El primero de ellos vestía un short de color azul, tipo bermuda, y cholas negras; no tenía franela; de contextura delgada; piel blanca; cabello corto, negro, y aproximadamente de un metro con 60 centímetros de estatura.
El otro vestía franela marrón, pantalón jeans con correa blanca y negra; medias verdes y zapatos rojos. De contextura delgada; piel blanca; cabello corto, negro; de estatura un poco más baja que el anterior.
Miriam Bustos