El gobierno de Colombia selló un histórico acuerdo de paz con la guerrilla FARC para poner fin a un conflicto que lleva más de medio siglo y que se ha cobrado la vida de miles de personas.
Entre las 297 páginas que conforman el tratado hay cuatro puntos clave que se destacan y que son producto de debate en Colombia:
Amnistía a los delitos vinculados a la rebelión
Si bien quedarán excluidos aquellos responsables de crímenes de guerra y de lesa humanidad, el texto señala que “Serán amnistiables los delitos conexos con el delito político que describan conductas relacionadas específicamente con el desarrollo de la rebelión y cometidos con ocasión del conflicto armado”.
Cabe destacar que esta amnistía no hará inmune a nadie de cualquier tipo de investigación por parte de la Justicia.
Conformación de un comité regulador de posibles violaciones del acuerdo
El mismo estará integrado por guerrilleros, agentes internacionales y miembros del gobierno colombiano y tendrá como objetivo investigar casos en los que individuos o grupos de personas no respeten el pacto.
Además, en caso de encontrar alguna irregularidad, la comisión deberá establecer la gravedad del hecho, tomar medidas paliativas y llegar a consensos para resolverlo.
Financiación de las FARC para la vida política
El documento indica que el “10% anual de la apropiación presupuestal para el funcionamiento de los partidos y movimientos políticos” será destinado para el partido político que constituyan las FARC, que a partir de 2018 contarán 10 bancas en el Congreso.
Además, esta decisión no modificará el porcentaje que reciben el resto de los partidos políticos colombianos que cuentan con personería.
No habrá extradición
El acuerdo establece que ningún delito cometido antes de la firma del pacto por los miembros de las FARC o de alguno de sus familiares será motivo de extradición.
Sin embargo, esto no significa que los responsables de crímenes de guerra no sean juzgados por la Justicia de Colombia y reciban penas de privación de libertad.
Nota tomada de Infobae