El presidente Nicolás Maduro, se mostró confiado la noche del jueves en que los países productores de petróleo que no pertenecen a la OPEP acompañarán el esfuerzo de reducir el bombeo de crudo que acordó el grupo para impulsar los bajos precios de los hidrocarburos.
Reuters
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) decidió el miércoles reducir levemente la producción por primera vez desde 2008, luego que Arabia Saudita, su miembro más importante, suavizó su postura frente a su archirrival Irán.
“Este acuerdo debe consolidarse en los próximos días“, afirmó Maduro, en un discurso transmitido por el canal estatal desde el palacio presidencial en Caracas.
“Estoy muy optimista en que los grandes países productores no OPEP, como nuestra hermana Federación de Rusia, también se sumen a este esfuerzo mancomunado de países OPEP”, apuntó.
Venezuela había insistido por meses en que los grandes productores petroleros debían llegar a un consenso para congelar los niveles de producción e impulsar los precios, en medio de una ingente sobreoferta de suministros.
El mandatario venezolano dijo estar convencido que habrá “un mercado petrolero estable” si los países productores de crudo OPEP y no OPEP se comprometen al recortar su bombeo.
Los miembros de la OPEP tendrán que acordar los niveles de producción de cada país en su próxima reunión formal en noviembre y algunas fuentes dijeron a Reuters esta semana que allí se podría extender una invitación a países que no pertenecen al grupo, como Rusia, para que se unan a los recortes.
El gobierno socialista de la nación sudamericana, que depende en buena medida de los ingresos por la venta de crudo, consiguió que el precio de su petróleo subiera a 40,40 dólares por barril el jueves, a raíz del anuncio en la OPEP, informó Maduro.
La cesta venezolana de crudo y derivados venía retrocediendo en el último mes y cerró la semana pasada en 37,58 dólares por barril.