Una mujer tailandesa acusada de insultar al fallecido rey del país fue obligada el domingo a arrodillarse ante un retrato del monarca delante de una comisaría en la isla de Samui, mientras cientos de personas reclamaban a gritos una disculpa.
La detención y humillación pública de la mujer se suma a otros incidentes similares desde que el rey Bhumibol Adulyadej murió la semana pasada, sumiendo a Tailandia en el duelo.
Dos agentes de policía llevaron a Umaporn Sarasat, de 43 años, hasta la fotografía de Bhumibol delante de la comisaría de Samui, donde ella se arrodilló y rezó, tanto en su camino hacia la comisaria como al salir.
La muchedumbre, algunos alzando retratos del venerado monarca, jalearon cuando la mujer apareció. Varios policías formaron una línea y enlazaron los brazos para impedir que la gente se lanzara hacia delante.
Es probable que Sarasat, propietaria de un pequeño negocio y acusada de escribir comentarios irrespetuosos en internet, enfrente cargos por insultos a la corona.
“Vamos a proceder con el caso como mejor podamos”, dijo a la gente el jefe de policía del distrito, Thewes Pleumsud. “Comprendo sus sentimientos. Ustedes vinieron aquí por lealtad a Su Majestad. No se preocupen, les doy mi palabra”.
Las autoridades han pedido calma ante la oleada de críticas en medios sociales contra aquellos que no se han vestido de negro y blanco en señal de duelo, y mientras algunos férreos defensores de la monarquía reprenden a la gente en público. Un portavoz del gobierno pidió tolerancia, señalando que algunos tailandeses no pueden permitirse las ropas de luto.
También han circulado noticias sobre precios disparados en estas prendas ante la creciente demanda desde la muerte del rey el pasado jueves.
Decenas de miles de tailandeses acudieron al Gran palacio de Bangkok, donde se conserva el cuerpo del rey, y el gobierno declaró un año de luto oficial.
Varios gobiernos extranjeros advirtieron a sus ciudadanos en Tailandia que eviten un comportamiento que pueda interpretarse como irrespetuoso.
Policías y soldados dispersaron el viernes en la isla turística de Phuket a una multitud de cientos de personas que buscaban enfrentarse a un hombre que creían había insultado al rey.
Imágenes de video mostraban a una muchedumbre bloqueando una calle ante una tienda de leche de soja y ondeando carteles con insultos como “búfalo”, una expresión local para aludir estupidez. Algunos gritaban al hombre que saliera.
Tailandia tiene draconianas leyes de lesa majestad que imponen duras penas de prisión por actos o escritos considerados como críticas al rey o su familia.
La operadora de la principal red de televisión por cable en Tailandia ha bloqueado noticieros extranjeros considerados como insensibles con la monarquía desde la muerte de Bhumibol. AP