Con el fin de mantenerse en el poder Maduro ha ido cerrando todos los caminos democráticos y sin ningún tipo de vergüenza rompió el orden constitucional de la República, provocando serias preocupaciones sobre el futuro inmediato del país y dejando a los negociadores, que el mismo propuso, sin argumentos válidos ante el mundo.
Desde entonces y después del rechazo que la suspensión del Referéndum Revocatorio ha producido dentro y fuera del país, se siente preso de sus propias invenciones.
Esa inocultable realidad, ha hecho que el gobierno -como cada vez que se siente perdido- recurra insistentemente en la tesis del dialogo. Usa una fórmula que le ha resultado exitosa en otras ocasiones, aparenta intenciones de hacer algunas concesiones (que no son tales, sino que son el cumplimiento de mandatos constitucionales) que disipan el malestar del grupo mayoritario, calma a la ciudadanía y evita el golpe que para su propio gobierno significaría la necesidad de implantar un nuevo sistema político, social y económico
El dialogo es indispensable, a él debemos llegar, pero con la certeza de que el ochenta por ciento del país exige un cambio en su conducción, que cada día que pasa este régimen en el poder hará mucho más difícil la reconstrucción del país. El denominador común de quienes votaron el 6 de diciembre es el de personas, sin ideologías partidistas definidas, que sueñan con una vida cotidiana de paz, de desarrollo, de oportunidad y que están absolutamente claros que todo ello pasa por un cambio de gobierno.
Quienes insisten en un dialogo sin condiciones, como si no hubiesen habido unos cuantos intentos anteriores, como si les bastara con la ilusión de un despertar de conciencias dentro del régimen, como si el país no estuviera viviendo una terrible crisis humanitaria, están subestimando el malestar. La frustración y ahora el sentimiento de impotencia que recorre las calles de nuestras comunidades especialmente de las más humildes.
A pocas horas del llamado hecho por la unidad democrática para una contundente protesta pacífica, en todo el país, este 26 de Octubre, exigiendo fecha definitiva para el referéndum revocatorio y el restablecimiento del hilo constitucional, el gobierno lucha por no terminar fulminado por su propio invento. Le acompañan solamente algunos miembros de sus partidos aliados, porque ya no tiene apoyo popular y saben que les queda poca incondicionalidad en el mundo militar. Es la hora de demostrarle al mundo, a la dirigencia política de todos los partidos que nosotros los ciudadanos queremos cambio, en paz, sin ceder ni pactar nuestros derechos ciudadanos, que somos mayoría y que nos acompaña la razón.
@judithsukerman / judithsukerman@yahoo.comv>