Los abogados del pelotero Alex Cabrera introdujeron un recurso ante la Corte de lo Contencioso Administrativo, solicitando acciones legales contra la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, a fin de poder jugar con los Tigres de Aragua sin someterse al examen antidopaje que le ha sido solicitado.
Ignacio Serrano / El-Nacional.com
Los representantes del jonronero han solicitado que la directiva de la LVBP y su Comisión Antidopaje sean declarados en desacato y se ejecuten medidas, luego de que autoridades del circuito le solicitaran someterse al control, siguiendo lo estipulado en la reglamentación, reseña El Nacional.
La información fue dada por una fuente tribunalicia y fue confirmada por dos personas cercanas al caso. Voceros de la liga declinaron hablar del tema.
Cabrera fue suspendido por 25 juegos al finalizar la temporada pasada, al violar la Política Antidopaje por consumir una sustancia estimulante y no seguir los pasos estipulados en las normas para poder tomar anfetaminas.
Las anfetaminas, especialmente el Aderall, que el inicialista toma con prescripción médica, están vetadas en el deporte mundial por generar vigor y fuerza, mejor estado de alerta y concentración, y combatir el efecto del cansancio en los atletas. Su uso puede tener un severo impacto en la salud del deportista.
La Corte Segunda de lo Contencioso Administrativo anuló cautelarmente la sanción, semanas después de conocerse el caso, y ordenó liberar al jugador del castigo, hasta tanto se determinara la procedencia del proceso que se le siguió.
Cabrera no fue firmado para este campeonato por los Tiburones de La Guaira, su equipo al momento de la infracción, y quedó en libertad.
La Corte Primera de lo Contencioso Administrativo prohibió posteriormente a los equipos ponerse de acuerdo para dejar al ex grandeliga sin uniforme.
Los Tigres lo contrataron cuando el torneo ya había empezado, a finales de octubre, pero el toletero derecho se negó a entregar una muestra de orina, cuando la Comisión Antidopaje se lo solicitó.
La reglamentación de la LVBP inhabilita a quien se rehúse a someterse al control. Estipula que la negativa se considera inmediatamente como un positivo en dopaje y acarrea la desincorporación del roster.
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