Mentira fresca preside el régimen y sus secuaces, hijos, ahijados y seguidores del “difunto eterno”, se acostumbraron a que la mentira fuera el pan nuestro de cada día en el discurso y actuaciones públicas de la comprobadamente corrupta revolución, que luego de 18 años de saqueos al patrimonio público y abajamiento del proceso educativo en todos los niveles, esquilmaron a la autentica república de Venezuela.
Por Julio César Arreaza B.
El modelo chavista-castrista se agotó, no da para más, allí está la destrucción visible del aparato productivo nacional y ahora sus capitostes buscando como náufragos un salvavidas vuelven a sentarse en una mesa de diálogo, que en el pasado es bueno anotar, solo sirvieron para que los forajidos ganaran tiempo y manipularan cualquier posibilidad democrática de entrega del poder, por elecciones y alternabilidad.
Pero Sancho con la Iglesia habéis topado y ahora en la mesa del nuevo intento de diálogo tenemos sentado al representante del Papa Francisco, y el régimen que se llama así mismo popular hasta en el más insignificante papel, se le exige que libere al secuestrado principal: la institución del voto. Esta mega crisis sólo la resuelve directamente la soberanía popular, de la Constitución brota el derecho del pueblo al RR, entiéndase que los derechos se ejercen y defienden, jamás se negocian. Debe acordarse ya un cronograma electoral suscrito por las partes. Un diálogo sin resultados es un diálogo inútil. Que sean liberados los presos políticos y dejen de ser rehenes para una negociación criminal. Que sean incorporados los diputados de Amazonas, separados arbitrariamente.
Pasó a un comentario internacional. Mal de muchos consuelo de tontos. No quiero ser tonto. Pero ahora entiendo mejor la locura del triunfo de Chávez en el 98. Me ha costado mucho aceptar la torpeza como el pueblo venezolano se lanzó por ese barranco. Sube mi autoestima al darme cuenta que el pueblo del primer país se lanzó por un barranco también. Serán los signos de estos tiempos apocalípticos. La vida siempre te da sorpresas. Estas no se agotan. Siento un guayabo. Hillary fue una estupenda candidata, políticamente correcta, como competir frente a un loco de carretera qué como Chávez promete la luna y los imposibles. Será un fraude y una gran decepción. Dios proteja al pueblo norteamericano y a los mejicanos.
Mis compatriotas latinos que votaron por trompita hicieron el triste papel de los esclavos que votan por sus amos. Ojalá no se arrepientan. Ganó el misógino y un hombre que no tiene NPI de lo que es gobernar. Está acostumbrado a mandar y mas nada, no sabe negociar. Defraudó a su país en beneficio propio. La ética ya no es un valor, sino la audacia loca. Seguimos en la crisis de civilización. Hasta cuándo? Es una crisis espiritual señores. Abramos los ojos.
No más prisioneros políticos, ni exiliados!