Más de 70 por ciento, en comparación con el movimiento registrado los años previos al cierre de los puentes internacionales, se redujo el intercambio comercial binacional por la frontera entre Táchira y el Departamento Norte de Santander, de acuerdo con estimaciones del sector aduanero venezolano, reseña La Nación.
Tras permanecer cerrada por más de un año, los gobiernos de Colombia y Venezuela acordaron en septiembre pasado abrir la frontera para el paso de la carga internacional, en horario nocturno. Representantes del sector aduanero, no obstante, señalan que el tránsito de mercancías de importación y exportación por los puentes internacionales de San Antonio y Ureña ha sido bajo, porque se dio prácticamente finalizando el año y no hubo tiempo ni condiciones para emprender operaciones.
“Se abrió muy tarde. Muchos importadores están parados porque no hay divisas, ese es el gran problema; la aduana de San Antonio está cooperando, al igual que la aduana de Cúcuta, pero no hay mayor movimiento de operaciones”, dijo Nelson Urueña, vocero del sector que agrupa a los auxiliares de la administración aduanera.
Asimismo, señaló que en el intercambio comercial que se ha registrado se ha observado un repunte de las exportaciones venezolanas hacia Colombia, principalmente de productos terminados relacionados con el plástico y el vidrio.
“Ha habido un movimiento importante de exportaciones, pero el de importaciones se redujo mucho en comparación con años anteriores. Estamos hablando de 70 por ciento, aproximadamente, en volumen de carga”, precisó.
De Colombia se están importando -acotó– básicamente insumos y materia prima para las empresas; los productos terminados están entrando muy poco.