Jadon y Anias McDonald son dos siameses que estaban unidos por la cabeza y nunca antes se habían visto el uno al otro. Sin embargo, el pasado octubre —cuando tenían un año y un mes de edad— fueron separados en una larga y complicada operación que duró 27 horas realizada en el Hospital Montefiore, en Estados Unidos, tal como cuenta la página «TheLADbible», publica abc.es.
La recuperación de los niños está siendo bastante rápida. Poco después de Acción de Gracias —que se celebra este jueves— serán trasladados a un centro de rehabilitación, seis semanas después de la operación que los separó, lo que supone la más rápida tras una intervención de este tipo.
Las posibilidades de sobrevivir en estos casos no han sido hasta el momento muy altas. Alrededor del 40 por ciento de los niños con este problema nacen muertos, y un tercio de los nacidos mueren a las 24 horas. Incluso si sobreviven, existe un 80 por ciento de riesgo de que mueran antes de los dos años, si no se separan a través de la cirugía.
En este caso, la recuperación de Jadon ha sido más rápida, pero por un tiempo, a Anias le costó más y todavía necesitaba un tubo para poder respirar. Sin embargo, ahora está mejor y su recuperación está siendo normal.
La cara operación se pudo llevar a cabo gracias a las aportaciones realizadas a través de una página web, en la que los usuarios donaron dinero para que la familia pudiera pagarla.