John Williamson se salvó de milagro: luego de ordenar un desayuno “normal”, casi se muere cuando por su garganta pasó una hojilla oxidada que estaba oculta dentro del pan que estaba comiendo.
Una vez en el hospital, las radiografías mostraron el filoso objeto incrustado en su estómago el cual tuvo que ser removido.
El joven de 23 años demandó a la panadería en busca de una compensación por el terrible incidente que casi acaba con su vida. Las policía local realizó las investigaciones pertinentes.
Con información de Dailymail