Aunque el salario aumentó cuatros veces en el año 2016, el sueldo no alcanza para cubrir las necesidades básicas de los venezolanos, así lo aseveró la diputada a la Asamblea Nacional por el estado Delta Amacuro, Larissa González representante argumentó que la inflación está acabando con el país.
González indicó que muchos son los problemas que tienen que enfrentar los deltanos a diario para salir adelante, mientras se agudiza la escasez de medicinas y alimentos, sin dejar de lado las angustias que se sufren a consecuencia de la inseguridad.
A su juicio el desmesurado aumento de los artículos de primera necesidad imposibilitan al venezolano a vivir de la manera en que las familias se merecen. También sumó a los problemas las interminables colas que ahora toca soportar bajo la lluvia o el sol a las afueras de las entidades bancarias para tan sólo retirar 10 mil bolívares en efectivo.
“La falta de políticas coherentes para contrarrestar la crisis ha llevado a Venezuela al precipicio donde nos encontramos hoy, con un dólar paralelo por los cielos que convierte al pobre en más pobre” así lo manifiesta la parlamentarian, asegurando además que el peor enemigo del país está residenciado en Miraflores.
Finalmente la parlamentaria Larissa González recalcó que el mejor recurso de la patria es nuestra gente amable y laboriosa que con trabajo lucha todos los días por rescatar al país, una Venezuela donde germine la esperanza entre las angustias.
Nota de prensa.