El 2016 culmina con signos económicos catastróficos, con la inflación más alta del mundo, escasez de alimentos, medicinas y en plena ejecución del “corralito” con la parodia de los billetes de 100 Bs.
En Venezuela no hay institucionalidad, el país lo mueven desde hilos perversos, con condiciones de gobernabilidad precarias: un Gobierno sin apoyo popular, endeudado, sin divisas, el aparato productivo destruido, bajos ingresos petroleros, PDVSA destrozada a niveles de incapacidad para incrementar la producción, inseguridad, presos políticos, crímenes selectivos, elite de narcotraficantes, servicios públicos vergonzosos y un desprestigio absoluto en la comunidad internacional.
Frente a esta crisis, un acuerdo político es lo aconsejable, esto no le gusta; el revocatorio lo liquidaron con trampas ilegales y la mesa de dialogo la convirtieron en una burla.
Este Gobierno juega al caos actuando como títeres de la estrategia Cubana; en un escenario de dialogo serio, esa elite deja de ser necesaria y pierde influencia para sus objetivos utilitarios. Esa es la razón por la que burlaron los acuerdo de la mesa de dialogo.
La MUD debe levantarse y decirle al papa Francisco que esa instancia se agotó por falta de voluntad política del Gobierno y en lugar de hablar con su representante, el chácharo de UNASUR y los ex presidentes, hay que conversar con Raúl Castro y Ramiro Valdez; son estos quienes deciden lo que el oficialismo ejecuta en Venezuela. Ponerle fin a este concierto hipócrita es un acto de respeto a la nación.
El caos es un formato cuyo objetivo central es desatar la represiónpara sembrar el terror. Nicolás en su laberinto cree que los demás no juegan; está bien lejos de la realidad, abandonar la legalidad por el caos terminara defenestrándolo del Gobierno y preso junto a una pandilla de corrupto por un lado y de narcotraficantes por el otro. La soberbia de Fujimori en Perú lo condujo a liquidar el Congreso y a partir de ese momento su Gobierno entro en cuenta regresiva, hasta el día de hoy el ex mandatario peruano sigue tras las rejas, pareciera que Maduro desatiende las lecciones históricas de América Latina caminando hacia el barranco de pretender liquidar la Asamblea Nacional que hace apenas 1 año fue elegida por 13 millones de venezolanos que reclaman cambio; el cogollo rojo debe mirarse en el espejo peruano; eviten una confrontación sangrienta. Ustedes siempre se van.
El 31 de diciembre de 1957 los venezolanos se dieron el abrazo de año nuevo sin señales claras; desde Mayo la palabra inspiradora de la pastoral de Monseñor Arias Blanco, impidió apagar la chispa encendida, los estudiantes en las calles, los familiares de los presos junto a los dirigentes sobrevivientes de los partidos políticos, el 21 de Enero arranca la huelga de la prensa, el pueblo en protesta sin retorno y el 23 el tirano PérezJiménez con más obra que Maduro huyo del país; estos también se van, siempre se van.
José Luis Pirela