El regreso de Ronda Rousey a la competición en la UFC no duró ni un minuto, reseñó AP.
La primera pelea de Rousey en 13 meses fue detenida a los 48 segundos del inicio el viernes por la noche y la luchadora estadounidense perdió ante la brasileña Amanda Nunes, campeona del peso gallo de la UFC 207.
Rousey (12-2) no llegó a tener opciones contra Nunes (14-4), quien la alcanzó con sus primeros puñetazos. Rousey mostró poca avidez defensiva cuando se tambaleaba y retrocedía mientras su rival la perseguía sin descanso propinándole múltiples golpes.
El árbitro, Herb Dean, paró el combate con Rousey todavía en pie, quien protestó brevemente la decisión antes de abandonar la jaula en brazos de su madre.
“¡Olvídense de Ronda Rousey!”, gritó una triunfal Nunes al público que abarrotaba el recinto. “Va a hacer películas. Olvídense de ella. Ya tiene mucho dinero”.
Cody Garbrandt ganó el combate por el título del peso gallo masculino en el penúltimo combate, superando al campeón Dominick Cruz en una sorprendente decisión en el T-Mobile Arena durante el tradicional espectáculo de final de año de las artes marciales mixtas en su ciudad natal.
El público se mostró sorprendido cuando Rousey no presentó batalla en su primera pelea desde que perdió el cinturón de campeona ante Holly Holm hace 13 meses. Esa fue la primera derrota de su carrera.
Rousey no competía desde noviembre de 2015, cuando Holm la frenó con una patada en la cabeza en una de las mayores decepciones en la historia de la MMA.
“Sabía que iba a ganarle (a Rousey)”, declaró Nunes. “Soy la mejor del planeta”.