A más de un mes de la desaparición del helicóptero militar que despegó desde Puerto Ayacucho con destino al aeropuerto de La Esmeralda en el estado Amazonas, los familiares de sus 13 tripulantes aún no tienen información de su paradero.
Según lo publicado por Losreportesdelichi, el hermetismo se ha acentuado durante las últimas dos semanas, al extremo, de que ningún funcionario ha suministrado información sobre el despegue de aeronaves para continuar la búsqueda.
Jesús Marcano, padre del primer teniente del Ejército Guillermo Marcano Nieves, de 23 años de edad, uno de los pasajeros de la aeronave, informó que antes los oficiales del Batallón de Infantería de Selva Rafael Urdaneta, al cual estaba adscrito, les daban datos sobre el sobrevuelo de aeronaves que participaban en la búsqueda y al final de la tarde les decían que no hubo resultados. Ahora no les dicen nada.
El silencio los ha obligado acudir a las dependencias de la Defensoría del Pueblo. En el despacho de Puerto Ayacucho un representante de este organismo se comunicó con el jefe de la Zona Operativa de Defensa Integral, vicealmirante Juan Carlos Caraballo, para preguntarle directamente qué información nueva tenía. El funcionario, según Marcano, solo se limitó a responder: “No puedo ayudarlos, diríjanse al Ministerio de la Defensa”.
Los parientes están desesperados. No saben a cuál organismo acudir para que les informen sobre el estatus de la búsqueda, cuáles son las zonas que han sido recorridas durante los operativos y dónde podría estar el helicóptero. Milagros Sanoja, madre de Alejandro Mariño, otro de los militares que viajaba en la aeronave, acudió a la sede de la Defensoría del Pueblo en Caracas. El funcionario que la atendió –no recuerda su nombre–se limitó a recibir por escrito la denuncia y le dijo que debía esperar.
Sanoja no solo reclamó el hermetismo con el que ha sido tratado el caso. También denunció que sustrajeron 5.000 bolívares de la cuenta de su hijo con la tarjeta de débito que él llevaba consigo cuando desapareció.
“Los retiros se hicieron los días 3, 15 y 18 de enero de este año. Él tenía una tarjeta del Banco de la FANB, donde le depositaban la quincena y se reportaron tres retiros que sumaron ese monto de 5.000 bolívares. Acudí a la institución bancaria y tampoco me dieron respuesta. Hay otros familiares que denunciaron la misma situación”, informó la mujer.