La diputada a la Asamblea Nacional (AN) y miembro de Cuentas Claras, Dignora Hernández considera que el hambre y la creciente necesidad de la población se han convertido en la gran amenaza que se cierne sobre el gobierno venezolano por lo que intenta combatirla esta vez con la puesta en marcha del Carnet de la Patria, “un instrumento perverso y malicioso que busca controlar y extorsionar al pueblo en un año inminentemente electoral”.
Nota de Prensa
Hernández indicó que con el Carné de la Patria se institucionaliza la discriminación ciudadana en Venezuela, “resulta difícil entender como en un país donde las autoridades niegan hasta el derecho a la identidad al no proporcionar el material de cedulación y pasaportes ahora desde el gobierno se planteen carnetizar a la población con un sistema chino de última tecnología, faciliten cédulas y pasaportes a los ciudadanos que la requieran o es que acaso estos Carné de la Patria sustituirán a la cédula de identidad venezolana, ¿Qué pasará con quien no tenga ese carné? será menos venezolano, tendrá menos derechos acaso”.
La dirigente de la tolda naranja aseguró que la tarjeta electrónica no resolverá las interminables colas para comprar alimentos ni tampoco abastecerá a ese mamotreto sin fundamento ni criterio denominado Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) “el problema aquí además de falta de producción es la politización de un sistema que está siendo manejado por partidarios del gobierno que en ocasiones lo utilizan para segregar a los ciudadanos que expresan su malestar por su mal funcionamiento, y como no quejarse de este sistema hambreador que ahora en vez de leche para los niños vende champú ‘made in canada’ y afeitadoras de obligatoria adquisición. El derecho a comprar productos de la bolsa quedó reducido a la venta de un ‘combo’ a quienes no se quejen del gobierno.
Asimismo insistió en que “es necesario que se le diga al pueblo de qué manera garantizará ese carné el acceso a las misiones sociales en un país en el que en vez de aumentar los programas sociales aumentan cada día más las personas que lo necesitan. Está claro que la nueva medida tiene es un perfil político y no social, mientras no se diseñen y ejecuten medidas que actúen sobre las causas de la pobreza y no se garantice el derecho de todos los venezolanos por igual a una vida digna, cualquier acción emprendida por el gobierno en este sentido, estará signada por la duda, pues al parecer solo buscan controlar a la población para mantenerse en el poder”.
Para Dignora Hernández con elecciones libres se podría sustituir lo que catalogó como “tragedia social que se hace llamar gobierno, es por ello que exigimos cronograma electoral para ponerle fin a esta crisis”, finalizó.