Argentina, con 3 puntos, y Brasil, con 4, disputarán el miércoles el clásico que decidirá el destino de ambos en busca de la clasificación, ante la presión de Ecuador y Venezuela, que pujan también por los tres billetes aún disponibles para el Mundial de Corea del Sur de este año, reseñó EFE.
Uruguay firmó la clasificación en la jornada pasada al acumular un pleno de puntos en el hexagonal final y, si gana mañana a Venezuela, se coronaría campeón a falta de una jornada para que concluya el torneo.
En la jornada pasada, mientras que Brasil rompió la condición de invicta de Venezuela -que está plagada de empates y solo ha logrado una victoria, por 4-2 sobre Ecuador, en todo el torneo-, Argentina perdió por 3-0 ante Ecuador.
Más allá de los desniveles futbolísticos mostrados en la mayoría de los partidos por Argentina, resulta notoria la falta de respuesta en el orden físico en casi todos sus jugadores.
Ante Ecuador el equipo argentino prácticamente se despidió del título que conservó desde el pasado Sudamericano Sub’20 y quedó, además, en una incómoda situación de cara a los dos últimos partidos, contra Brasil mañana y frente a Venezuela el sábado venidero.
“Todavía hay seis puntos en juego y tenemos mucha ‘chance’ (oportunidad), si lo hacemos bien, de poder clasificar al Mundial”, afirmó a Efe Claudio Úbeda, seleccionador argentino.
Brasil, que repuntó ante Venezuela en su pretensión de acceder al Mundial, tras quedarse con mínimas posibilidades para ganar el título, recuperará para mañana a los defensas centrales Lucas Cunha y Lyanco, después de cumplir suspensiones en el torneo.
“Conseguimos hacer el gol al final (contra Venezuela) y lograr un resultado que es muy positivo para nuestras aspiraciones”, señaló Eduardo Barroca, ayudante del técnico brasileño Rogerio Micale.
La rivalidad entre argentinos y brasileños en más de una oportunidad los ha llevado a dar grandes sorpresas, por lo que para el partido de mañana no hay un favorito.
En el primer partido de la triple jornada en el estadio Atahualpa, de Quito, se medirán Ecuador, con 4 puntos, y Colombia, con uno.
En la fase de Grupos, Ecuador ganó por 4-3 a Colombia en un vibrante enfrentamiento. Colombia sabe que si pierde o empata se despedirá del torneo a falta de una jornada, mientras que Ecuador requiere del triunfo para seguir en el camino al Mundial.
La irregularidad ha sido la constante del equipo ecuatoriano, que, si quiere ir al Mundial, deberá ganar mañana a Colombia.
“Aquí no hay equipo muerto, hasta la penúltima fecha estarán todas las selecciones peleando un lugar para el mundial”, aseguró el seleccionador de Ecuador, Javier Rodríguez.
Por su parte, Carlos Restrepo, que dirige a Colombia, resaltó: “Lo que se debe hacer ahora es seguir la lucha hasta el final y tratar de conseguir que el equipo recobre la parte emocional en busca de un boleto al mundial de la categoría”.
Venezuela, que también tiene 4 puntos, se enfrentará al cuadro con mejor respuesta física y futbolística, Uruguay, que, una vez consolidado su cupo al Mundial, saldrá a por el título de la categoría que ganó por última ocasión en 1981.
Los llaneros, que echarán de menos a Heber García y Edwin Quero, por suspensiones, procurarán pasar la prueba más difícil ante los charrúas que, de lograrlo, definirán la clasificación en el último encuentro contra Argentina con el que se enfrentará por primera vez en el actual torneo.
“Vamos a luchar hasta el último punto, como lo sabemos hacer dentro de la cancha, jugando limpio. Venezuela irá al Mundial de Corea del Sur”, dijo el seleccionador Rafael Dudamel que se ha sentido perjudicado por las decisiones arbitrales en el torneo.
Para el seleccionador uruguayo Fabián Coito, parte del éxito que está alcanzando su equipo se debe a que su juego se basa en las virtudes del conjunto como su “fortaleza defensiva”, su capacidad de “recuperación de la pelota” y su facilidad para contraatacar.
Uruguay daría la vuelta olímpica al final del partido de mañana, pues acumularía 12 puntos, inalcanzables para las demás selecciones, por lo que no dará ventajas a Venezuela