En 30 minutos Carlos Nieto Palma, coordinador general de la Organización Una Ventana a la Libertad, resumió a la prensa la situación carcelaria en Zulia. “Es preocupante. El hacinamiento se encuentra en todos sus niveles”. La sobrepoblación en el retén de Cabimas y Colón alcanza el 800 por ciento. En solo dos penales conviven tres mil presos, procesados y no procesados. Así lo reseña laverdad.com
Por Andrea Querales
Desde el cierre de la Cárcel Nacional de Maracaibo, en septiembre de 2013, creció el hacinamiento en los retenes y comandos policiales y la fuga de reclusos. El jurista detalló que Cabimas cuenta con mil 329 y en Colón hay 352. “El país está rodeado de minicárceles. En cada sede policial hay una cantidad importante de presos”. Esa situación favorece la fuga, en los últimos meses se escaparon 41 reclusos.
A la sobrepoblación se le suman los problemas de alimentación y acondicionamiento. Muchos privados de libertad pasan hambre debido a que sus familias están en otros lugares del país, y económicamente no disponen para viajar todas las semanas y llevarles los insumos y alimentos que necesiten, detalló Nieto.
Peligro
La realidad penitenciaria pone en jaque el tema de seguridad para los venezolanos. “Los policías se están dedicando a cuidar presos en lugar de estar en las calles velando por la tranquilidad de las personas. Los oficiales no se prepararon para cuidar presos, para eso están los penitenciaristas que se forman para reeducar a los reclusos, la Constitución lo establece”.
Aseguró que el nuevo régimen penitenciario ha fracasado, la ministra Iris Varela prometió la construcción de una cárcel por estado y después de cinco años en su gestión no ha construido el primero. En Zulia solo se reacondicionó el Centro de Arrestos para Mujeres, Ana María Campos, en el municipio San Francisco, donde alojan a 92 internas.
El coordinador de la ONG resaltó que el estado intenta ocultar las cifras que todo el mundo sabe, pero que oficialmente no se registran. “Toca buscarlas por los caminos verdes, hacer proyecciones o llevar la cuenta”. La responsabilidad es directamente del Ministerio para el Servicio Penitenciario.
Retardo procesal
Existen los casos de privados de libertad que esperaban la cita para la audiencia preliminar. Los cambiaron de cárcel y cuatro años después siguen sin asistir a la primera audiencia. “La situación es grave y preocupante”. La proyección no es buena y las autoridades no muestran una solución inmediata.
Las posibles soluciones inmediatas serían eliminar el retardo procesal, agilizar los juicios, el 70 por ciento de los privados no han sido procesados, o sea que todavía no saben si son culpables o inocentes.