La fuerte inflación ha vuelto casi imposible para los venezolanos asistir a un salón de belleza o barbería, expresó la Asociación de Trabajadores, Emprendedores y Microempresarios (Atraem) sección Estética y Belleza. El gremio reveló que este año se ha reducido en 60% la asistencia de clientes a este tipo de comercios. Asimismo, informaron que el costo de los productos, tipo tintes o decolorantes, ha aumentado 300%.
Gregorio Hernández, coordinador de Atraem Estética y Belleza, explicó que las peluquerías se encuentran desiertas, incluso los fines de semana que era el día más movido para esta rama de la económica. “Podemos afirmar que en 60% ha disminuido la presencia de clientes en nuestros negocios, ya que el alto costo de la vida a convertido el cuidado de la imagen personal casi en un lujo”, dijo.
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