Un fuerte terremoto de 6,1 en la escala Richter sacudió hoy la provincia de Jorasán Razavi, en el noreste de Irán, donde al menos dos personas fallecieron y varias resultaron heridas, según datos oficiales.
El temblor, cuyo epicentro se situó en el pueblo de Sefid Sang a las 10.40 hora local (06.10 GMT), tuvo una treintena de réplicas y se sintió en la ciudad santa de Mashad, situada a unos 80 kilómetros.
El jefe adjunto de las operaciones de rescate de la Media Luna Roja iraní, Shahin Fathi, señaló a la agencia semioficial ISNA que hasta ahora se han registrado dos muertos en Jorasán.
Cuatro pueblos quedaron destruidos entre un 40 y un 100 por cien, pero la cifra de víctimas no es muy elevada debido a que el epicentro del terremoto tuvo lugar en una zona poco poblada, indicó la Media Luna Roja de Mashad.
Por su parte, el jefe de los Servicios de Emergencia, Pir Hosein Kolivand, explicó que “el mayor daño” lo sufrieron los pueblos de la zona y advirtió de que existe la posibilidad de nuevas réplicas y de un aumento del número de heridos.
El corte de las comunicaciones telefónicas y de varias carreteras de la provincia impide tener todavía una cifra definitiva de heridos, que se sitúan entre seis y once, dependiendo de las fuentes.
También el suministro de agua ha sufrido cortes y las escuelas han sido cerradas en muchas zonas de Jorasán, incluida la ciudad de Mashad, donde una de las réplicas tuvo una magnitud de 4,7 grados en la escala Richter.
El Centro Sismológico Nacional de Irán informó de que el movimiento telúrico se registró a 10 kilómetros de profundidad, a 60,23 grados de latitud y 35,83 de longitud.
Irán tiene una gran actividad sísmica. Los terremotos más graves hasta la fecha se produjeron en diciembre de 2003 y en junio de 1990, cuando perdieron la vida 31.000 y 37.000 personas, respectivamente. EFE