En la Unidad de Quemados del Hospital Coromoto estaba recluido Franklin Aular (30). El informe médico detallaba que tenía quemaduras de tercer grado en el 82 por ciento de su cuerpo. Los galenos lo atendieron por cuatro días en Maracaibo, pero no resistió las heridas, reseña La Verdad.
Los dolientes detallaron que Aular se trasladaba, el pasado 3 de abril, por el sector Bella Vista II, en Valencia. Por un lado pasó un camión que transportaba bombonas de gas, cuando el vehículo estaba cerca explotó una de las bombonas y provocó el accidente.
Los residentes de la zona se acercaron para auxiliar a las víctimas, lo llevaron a un hospital de la localidad. Durante tres días, los médicos atendieron a Aular hasta que ordenaron el traslado al Zulia. Con los grupos de rescate coordinaron su movilización en un helicóptero.
Las esperanzas de vida de Aular eran pocas. Las heridas eran profundas y no habían tenido los cuidados necesarios en las primeras horas. Ingresó a la UCI del Coromoto y allí agonizó hasta el pasado lunes en la tarde.
Los familiares se reunieron en la morgue forense y se concentraron en agilizar los trámites para poder enterrar a Franklin en su ciudad natal. Comentaron que Franklin residía en el sector Negro Primero de Valencia, trabajaba como comerciante y procreó dos hijos.