El lugar de trabajo es un escenario recurrente en las fantasías de cualquier persona. El escritorio, la sala de juntas o el rinconcito de la máquina de café; pueden ser susceptibles de llevar a cabo un experimento sexual. Si andas un poco perdida, nosotras te decimos cómo sacarle el máximo partido a la oficina.
Sobre la silla de escritorio
Aprovecha que el despacho esté vacío, tras una larga jornada laboral, y baja las persianas. Da igual si prefieres una cómoda butaca o si eres más de silla de ruedas, pero lo importante es estar sentados. Deja que él se siente primero, y siéntate encima de él. Puedes quedarte frente a él, o darle la espalda. Experimente y elige la postura que más te satisfaga.
Debajo del escritorio
Pero por si acaso no quieres levantar sospechas y prefieres evitar miradas; descubre el maravilloso universo que se esconde debajo del escritorio. Aquí no hay normas, puedes llevar a cabo la postura que quieras, eso sí, ten cuidado con la cabeza, porque los coscorrones están asegurados.
Encima del escritorio
En cientos de películas habrás visto este escenario, y seguro que se te ha pasado por la cabeza más de una vez recrearla. Tras cerciorarte de que la oficina está en calma y no hay nadie que pueda sorprenderos, échate sobre la mesa y deja que tu pareja se coloque de pie entre tus piernas. Igual que en el escenario anterior, las posturas pueden tener diferentes interpretaciones. Puedes levantar tus piernas de forma perpendicular a tu tronco, o intentar mantener un ángulo agudo, agarrándote bien a tu partenaire para no perder el equilibrio. Prueba esta postura con diferentes modificaciones, el escritorio del jefe puede ser muy divertido.
Hay tantas posturas, que no tienes que limitarte a la oficina, prueba también a practicar sexo por todas las estancias de tu casa. No te aburrirás.
En el ascensor
Dale una oportunidad al ascensor. Las respiraciones entrecortadas, las miradas furtivas a través del espejo y por supuesto, esos escalofríos que recorren tu cuerpo cuando el ejecutivo guaperas del edificio te roza “sin querer”. Seamos sinceras, el ascensor tiene mucho morbo. Debes estar siempre bien preparada y tener unas cuantas posturas en la mente, por si un día, se sube al ascensor alguien interesante y le da al stop, para que deis rienda suelta a vuestra pasión. Y si no hay ascensor en tu lugar de trabajo ¡busca uno ya mismo!
En la sala de juntas
Si los escenarios anteriores no te convencían, tranquila, siempre hay más de una opción en cualquier oficina. ¿Eres de las que teme la sala de juntas? Pues olvídate de tus miedos, y recuerda que la erótica del poder es una realidad. Libera tu imaginación y experimenta por toda la sala, seguro que su gran mesa, los sofás para las visitas, o incluso por qué no, apoyándote en esa pizarra llena de gráficos.
Y si quieres subir un poco más la temperatura y tienes una fantasía a lo Cincuenta Sombras de Grey, estas ideas os ayudarán a llevarlo a cabo.
Termina en el párking…
Aunque ya no estés en la oficina, también tienes opciones para hacer el amor cuando bajéis al párking… ¡Dentro del coche! Echa un vistazo a estas increíbles posturas para practicas sexo en el coche y da rienda suelta a la pasión…
Nota toma de Enfemenino