La semana pasada se llevó a cabo el lanzamiento y bautizo del libro La Rebelión de los Tejones, escrito por el periodista y editor, Leocenis García, mientras fue preso político en el Sebin. Este evento se realizó en un prestigioso hotel de la ciudad de Caracas donde reunió a políticos y personalidades del mundo empresarial del país. La madrina del libro es Rosaura Valentini, esposa del preso político y líder opositor, Yon Goicoechea, quien realizó el prólogo de la obra.
Nota de prensa
Valentini, durante el lanzamiento, proporcionó un discurso donde señaló los siguientes puntos:
“Hay pocos países tan hermosos como el nuestro, y ningún precedente de otra sociedad latinoamericana que haya luchado tanto por su libertad como lo estamos haciendo nosotros en este momento. Es un extraño designio que a los venezolanos nos haya costado siempre más cara esa libertad. Pero lo maravilloso y nuestro mayor motivo de orgullo, es que en todas sus épocas, esta tierra ha parido gente noble y dispuesta a rebelarse por el tiempo y la fuerza que sean necesarias. Estoy con ustedes con toda el alma y daría lo que fuera por marchar en las calles y los sueños de Caracas, por enfrentar el miedo y los gases de nuestra Venezuela”.
Así mismo señaló que La Rebelión de los Tejones, es una propuesta ideológica liberal aplicada al caso venezolano, que contiene una aguda crítica al estatismo de los últimos 80 años en Venezuela, enfatizando el paroxismo y degrades sin límites del sistema económico actual. “Compartimos muchas de las ideas expuestas, por valiosas y asertivas. Mientras que nos alejamos de otras pocas que nos resultan en exceso duras. Pero si algo nos hace recomendar este libro es la honestidad intelectual con el que ha sido escrito. Sin duda, vale la pena leerlo”, enfatizó.
En este orden de ideas, Rosura Valentini, destacó que La Rebelión de Los Tejones aporta un tono positivo como valor agregado; “Leocenis no se sentó a llorar cuando estuvo encerrado. Desde su celda soñó un país y decidió compartir su sueño, como lo demuestran las páginas que tengo entre mis manos. El autor propone -y ahí está nuestra mayor coincidencia-, un modelo económico, político y social basado en la libre empresa, la productividad, la creatividad, el trabajo y la innovación del venezolano. Rechaza y rechazamos el Estado omnipresente, que se cree con derecho a sustituir a la sociedad civil”.
Ante este panorama, Valentini aprovechó la oportunidad para rechazar la pretensión de quienes, a su juicio, piden todo el poder bajo la promesa de protección. “Porque esa historia no termina en protección, sino en corrupción. Venezuela cedió su libertad a un mesías y ahora tiene hambre y enfermedad. Cuando pide pan, le dan bombas lacrimógenas y cuando pide medicinas, les ponen francotiradores en las azoteas”.
La esposa de Goicoechea, explicó que Venezuela necesita Estado de Derecho para garantizar una economía sana. Acabar con el Control de Cambio, abrir las importaciones y las exportaciones, acabar con las confiscaciones, los robos de empresas y tierras, dejar de meter presos a empresarios, abrirse al mundo para conseguir conocimientos y tecnología. Pero, lo más importante es una idea muy bien desarrollada en el libro: Venezuela necesita de una élite productiva. No extractivista, no segregadora.
“Este libro es, en el fondo, una protesta. Una protesta contra la viveza criolla llevada a la macroeconomía, contra la cultura del egoísmo llevada a la política. Y nosotros protestamos con Leocenis. Bautizo este libro en nombre de mi esposo y todos los presos políticos. En nombre de las madres que han perdido hijos en las marchas. En nombre de quienes hoy pasarán su primer día injustamente privados de libertad. Pero sobre todo, lo bautizo en nombre de quienes superaron las adversidades, como Leocenis García superó su prisión. En honor a un país que se levantará de sus cenizas, que será desarrollado y libre. ¡A tu salud, Venezuela! Para que vueles siempre como los papagayos en la playa, de cara al sol y por encima de la sombra”, concluyó.
La obra La Rebelión de los Tejones, se encuentra en las principales librerías del país, bajo el sello editorial de Libros Marcados, quien sacó al mercado en la primera edición, unos 10 mil ejemplares.