Los requisitos para formalizar la inscripción de los aspirantes a constituyentes deben ser revisados de inmediato, especialmente la solicitud del tres por ciento de las firmas para los espacios territoriales, porque es una cantidad exagerada para cumplirla en un lapso tan corto de tiempo, expresaron dirigentes de la Fundación para la defensa de la vejez (Fundaprov) y la Liga vecinal de Caracas, Arsenio Henríquez y Marcos Torres respectivamente.
Este requerimiento es imposible de cumplir para la inmensa mayoría de los ciudadanos de pocos o medianos ingresos y sólo los podrán cumplir los representantes del gobierno y los que tengan una gran maquinaria política y muchos recursos económicos.
Explicaron que, por ejemplo, en el caso de Caracas o Distrito Capital para aspirar en por el sector territorial, se requieren aproximadamente la presentación de 48.836 firmas, en un lapso menor a los cinco días, lo cual es una gran limitación y además la cantidad de hojas de papel y de personas que se requieren para cumplir con esa exigencia en tan corto tiempo, que será imposible de cumplir.
-Necesitamos conformar una Asambleas Nacional Constituyente amplia, plural y participativa, donde concurran líderes de los sectores políticos, sociales y populares, fundamentados en la discusión y el debate, pero eso será posible si se modifican de inmediato estas exigencias draconianas, dijeron.
En ese sentido, hicieron un llamado urgente a los directivos del CNE, que así como se concedió la prórroga el pasado viernes para facilitar la inscripción, ahora nuevamente se comprenda que con la exigencias actuales serán muy pocos quienes podrán cumplir las exigencias.
“Estamos convencidos de que hay un gran ánimo de participación en este debate por parte de la mayoría del pueblo con el objetivo de afianzar la paz en el país y la reconciliación, pero con las condiciones actuales parece que será difícil”, expresaron Torres y Henríquez.
-Nosotros estamos constituidos en la opción democrática, porque creemos en la necesidad de la paz y rechazamos toda clase de violencia; la necesidad de dialogar y construir entre todos, un gran acuerdo nacional, pero eso será posible con una participación plural y auténticamente democrática, concluyeron.