Los números son contundentes. Sólo un 12,4 por ciento de los venezolanos se acercó a las urnas para participar de la propuesta del régimen de Nicolás Maduro. En otras palabras, casi el 90 % de los ciudadanos le dio la espalda a la dictadura y no quiso ser parte ni cómplice de lo que millones consideran una trampa por parte del gobierno central, reseña Infobae.
Fueron 24 horas de extrema tensión, donde Maduro y sus funcionarios a lo largo de toda la nación se dispusieron a reprimir con furia las manifestaciones que se multiplicaron en Mérida, Táchira, Sucre y Bolívar, entre otros estados. Como resultado de esa política 16 personas perdieron la vida. Fueron asesinadas por oponerse a los mandatos de un poder que pierde legitimidad cada hora.
Once países -al momento del cierre de esta nota- se pronunciaron en contra del convocatoria a la Asamblea Constituyente y advirtieron que no reconocerán los resultados de esta jornada. Maduro, en tanto, trató de minimizar el impacto del rechazo de la sociedad y de la comunidad internacional: “No nos importa la opinión de los oligarcas, nos importa la verdad del pueblo“, dijo. Un pueblo que hoy le dio la espalda. Una vez más.