“Quiero hacer un llamado a todas las autoridades nacionales a que recapaciten, porque con mentiras y engaños no se va a ningún lado. Esto solo nos lleva a una profunda crisis. Esa Asamblea Nacional Constituyente y sus decisiones no son reconocidas por el pueblo venezolano ni por organismos internacionales, por eso es mejor recapacitar y que las aguas vuelvan a su cauce”.
Nota de prensa
Así se expresó el Arzobispo de Ciudad Bolívar, Monseñor Ulises Gutiérrez, al culminar la ceremonia de ordenación de dos nuevos presbíteros y un diácono que ofició en la Catedral de Ciudad Bolívar, con motivo de la celebración del Día de la Virgen de las Nieves, patrona de esta ciudad capital de estado.
El prelado señaló que la palabra y sentir del Papa Francisco y de la iglesia, siempre han sido la paz y entendimiento de los pueblos. “Yo invitó a que recapacitemos. Estamos a tiempos, siempre estamos a tiempo, y evitar que esta confrontación nos lleve a un plano mayor de lo que ha ocurrido en estos más de cuatro meses de protestas con tantos fallecidos, y tantas sangre inocente derramada”, afirmó.
Acotó que la recién instalada Asamblea Constituyente nació “bañada de sangre y desde la mentira”. Habló de la situación fraudulenta que envolvieron esas elecciones, del fraude confirmado por la empresa a cargo del conteo de votos, y de lo que fue una realidad palpable ese día de elecciones en el país con la poca participación de votantes. Algo que sin duda habla del fraude habido en todos los anteriores procesos electorales.
En este sentido, afirmó que “necesitamos entrar en cordura, que pasa por aceptar los cuatros importantes y necesarios planteamientos, como lo ha dicho el Cardenal Parolin: ayuda humanitaria, cronograma de elecciones generales, liberación de los presos políticos y reconocimiento a las instituciones democráticas, en este caso la Asamblea Nacional”.
De igual manera, agregó que es importante dejar de lado la “soberbia” y asumir una “actitud nueva” que puedan llevar a un encuentro de hermanos, sin distinción política, ni credos religiosos, ni de color, “porque somos un pueblo con vocación democrática y llamados a la unión”.
El arzobispo de Ciudad Bolívar, también, se refirió a la manera como cada día la situación se torna más difícil para todos los venezolanos, incluso para el mismo gobierno. “Yo lo veo (gobierno) como contra la pared”, con una actitud de “no y no” queriendo ver que desde afuera se le trata de imponer, cuando es “solo que vea que esa actitud no lo lleva a ningún lado, y que trae consecuencias muy grandes para todos”.
Para el ciudadano de pie, para ese pueblo que está pasando hambre, que no tiene medicinas, que no le alcanza el salario, envió un mensaje de esperanza y fe, de seguir adelante en esta lucha. “Yo siento que esta situación en lugar de llevarnos a una tristeza mayor, es una situación que nos tiene que llevar a mayor esperanza”, resaltó.
Invitó a todos los venezolanos, y en particular al pueblo sufrido de Ciudad Bolívar, a no perder las esperanzas, “la iglesia los acompaña a seguir adelante con la fuerza y fe en Dios”.