La votación es el hecho democrático, más importante, en donde el pueblo relegitima a sus autoridades o las sustituye por otros liderazgos, en función de la buena o mala labor al frente de las instituciones del Estado para lo cual fueron electos temporalmente.
En Venezuela la instauración del voto popular ha costado muchas vicisitudes llenas de represión, tortura, cárcel y muerte. Solo en el año 1945 con la Presidencia de Isaías Medina Angarita se dio inicio a la elección popular del Presidente de la Republica. Luego la larga Dictadura de Marcos Pérez Jiménez con su atroz persecución de los más destacados líderes políticos y la eliminación de los partidos. En 1948 bajo la presión soterrada del pueblo oprimido, líderes políticos en la clandestinidad y la acción decidida de parte de las fuerzas armadas, salimos de la dictadura y entramos en una nueva fase de la democracia, con la implementación, por parte de los partidos y líderes políticos de un pacto de gobernabilidad y afianzamiento de las instituciones democráticas, entre ellos el derecho al voto popular, universal, libre y secreto. El denominado Pacto de Punto Fijo firmado por AD, URD, COPEY y el PCV que pronto sale del pacto.
Luego en 1989 bajo la segunda presidencia de Carlos Andrés Pérez se implementa la votación de gobernadores y alcaldes que hasta ese momento eran escogidos por el Presidente de la Republica. Se inicia un proceso de profundización de la democracia al descentralizarse y regionalizarse la escogencia de los actores políticos locales directamente por el pueblo.
En ese largo período y hasta 1.999 las autoridades electorales gozaban de total independencia para la realización de los procesos electorales establecidos en la ley, y de obligatorio cumplimiento en cronogramas electorales bien definidos, con suficiente tiempo, para su ejecutoria y postulación de candidatos por parte de los actores políticos de turno. Era normal que los miembros del Poder Electoral fuesen de diferentes partidos lo cual garantizaba la democratización del proceso.
A partir de 1.999 con la ascensión al poder de Hugo Chávez Frías, con el voto popular, se inicia un cambio profundo en la autonomía del Poder Electoral, se da comienzo a una, cada vez más, arbitraria injerencia del Poder Ejecutivo en los asuntos electorales, teniendo como principal autor al Presidente de la República. La estrategia consiste en imponer la mayoría de las autoridades electorales por parte del ejecutivo para luego incidir directamente en la manipulación de todo el proceso electoral y favorecer al gobierno chavista, ejemplo de ello: modificar los circuitos electorales hacia las zonas populares que más favorecieran al régimen, y cambiando la proporción de diputados por circuitos, sacando menos votos ganaban más diputados a la Asamblea Nacional. Otra estrategia, violando la ley electoral cambiar las fechas de las elecciones, arbitrariamente, fijándolas para cuando les convenga electoralmente. Inhabilitar o poner preso, ilegalmente, bajo cualquier pretexto, a importantes líderes políticos a objeto de que no participen en procesos electorales. Así hemos tenido que batallar contra el régimen desde 1.999 con Chávez y Nicolás Maduro.
Las elecciones de gobernadores pautadas, por la ley, a realizarse en diciembre del año 2015 las trasladan, sin son ni ton, para diciembre del presente año. Luego, entre gallos y medianoche, sorprenden al país democrático, señalando que las trasladan para octubre venidero. Con la infame intensión de impedir que los partidos políticos de oposición no tuviesen tiempo de inscribir candidatos e ir ellos solos al proceso de escogencia de gobernadores. Luego, fijan 15 días hábiles para la inscripción de candidatos, teniendo ellos ya diseñada su vulgar estrategia y sus candidatos, perdedores, previamente seleccionados. Obligan entonces a la MUD, a proponer candidatos transitorios para garantizar la participación electoral en los comicios para gobernadores.
La MUD inicia, entonces, un apresurado proceso de consenso y elecciones primarias para la escogencia de sus candidatos a gobernadores. Una vez escogido los candidatos, se le solicita formalmente al CNE la sustitución, establecida en la ley electoral, de los candidatos definitivos por los transitorios y eliminar del tarjetón electoral, las tarjetas de los partidos de oposición que sobran y dejar la del candidato único de la oposición escogido por el pueblo en primarias electorales.
Bueno, ni lo uno ni lo otro, hasta ahora, el régimen y su brazo ejecutor el CNE, no se ha pronunciado al respecto, y tienen hasta el 10 de octubre para realizar los cambios que legalmente le exige la MUD, con miras a realizar un proceso electoral transparente para todos. Estrategia del régimen, confundir al pueblo llano y decente en el acto electoral propiciado el voto nulo que les favorezca, porque pueblo no tiene.
Las elecciones del Poder Legislativo de los Estados, Alcaldes y Concejales, pautados por ley electoral, para diciembre el año 2015, hasta ahora no tiene fecha cierta de ejecutoria. En cuanto a la Asambleas Legislativas Estadales, hoy mayoritariamente en manos del régimen. La estrategia de PSUV es no llevarlas a cabo conjuntamente con las de gobernadores, para de alguna manera poder presionar e inclusive destituir, cuando les convenga, a los nuevos gobernadores electos, hasta allí llega el cinismo del régimen.
Ahora bien todas estas marramuncias del ente electoral dirigidas desde el PSUV y el gobierno central, no son ni serán obstáculos suficientes para evitar que el pueblo democrático y pacífico de Venezuela ejerza su derecho legítimo a expresarse en las urnas electorales. Entre el 50% y el 60% del pueblo demócrata participará en las elecciones regionales, según los últimos sondeos de las encuestadoras.
En el Estado Táchira el CNE inscribió extemporáneamente, aproximadamente, 17.000 extranjeros con cédula venezolana para que voten en este proceso, lo cual fue denunciado por la MUD ante el ente electoral.
Bueno, esas son las barreras que ponen los dictadores para evitar que los pueblos ejerzan su derecho constitucional a elegir, cada período, a sus autoridades en forma libre y democrática. Este juego diabólico de los dictadores no es nuevo en Venezuela ni en otros países de la región, en donde las tendencias antidemocráticas pujan por perpetuarse en el poder, oprimir a los pueblos y recientemente vinculados con carteles de la droga y el terrorismo internacional.
La represión, presos, torturados, muertos y asfixia por bombas lacrimógenas, etc. que vivió, lamentablemente, el pueblo en las calles. Son parte de ese proceso histórico por la libertad y la democracia. En la época de Pérez Jiménez, también muchos jóvenes fueron desaparecidos, torturados, muertos, exilados, etc. sin desconocer los abusos perpetrados en la denominada cuarta república. Ellos y los de ahora, son parte del dolor y del espíritu de rebeldía que tiene un pueblo bueno y esperanzado para seguir en el combate democrático. Que debe culminar en un pueblo libre, sin opresores ni oprimidos, con una juventud que no busque en otras fronteras la oportunidad de vivir, crecer, formarse, educarse, consolidarse como familia, aportar con su trabajo al engrandecimiento del país, vivir en paz y seguridad, con salud, disfrutar de las bellezas de nuestro país, llegar a la vejez sin ser víctima de la bala criminal, viajar a otras culturas y regresar a la patria, salir del rancho a la urbanización con su esfuerzo y la oportunidad que brinde el Estado, etc…. que hoy se le niegan en suelo patrio.
Debemos entonces levantarnos con coraje y vencer en las urnas electorales la temeraria sombra de la dictadura.
CUANDO EL LIBERTADOR EN SU EPOPEYA EMANCIPADORA POR AMÉRICA LATINA, DECIDIÓ ATRAVESAR LOS ANDES, NO PENSO EN LO INMESO Y DIFICULTOSO DE LA MONTAÑA, SINO EN LA INMENSIDAD DE LA LIBERTAD.
Econ. Nelson A. Pérez Valdivieso.
Miembro del Secretariado Nacional de Movimiento Progresista de Venezuela. MPV.
@nelsonperezv