Venezuela volvió a dar señales de mejora con esperanza en las jóvenes promesas que sueñan con el Mundial de Catar-2022, mientras su técnico, Rafael Dudamel, pide “paciencia” frente a la mayor deuda que mantiene su renovado equipo: el gol.
Nota de Prensa
De nuevo con chicos como el arquero Wuilker Faríñez en roles protagónicos, la selección venezolana empató el jueves con Uruguay, 0-0 en casa, en la penúltima jornada de la clasificatoria mundialista sudamericana a Rusia-2018, luego de igualar con Colombia (0-0) y Argentina (1-1) en la pasada doble fecha.
Edinson Cavani y Luis Suárez fueron neutralizados por la reconstruida zaga vinotinto, un destino que habían tenido previamente otras súperestrellas como Radamel Falcao García o Lionel Messi.
Así, Venezuela ratificó que recuperó la solidez defensiva que había perdido y paró una hemorragia de goles encajados que la hundió en el último puesto desde el principio -lugar que mantiene con apenas 9 puntos-, condenada a una temprana eliminación.
“Recuperamos el nivel de convicción que se aleja con las derrotas y eso tiene mucho valor”, dijo Dudamel en la rueda de prensa postpartido.
Ello se ha conseguido con jóvenes que ganan terreno con rapidez.
Sin embargo, el equipo echa en falta mayor pegada a la hora de atacar. El entrenador ha apostado por el contragolpe con la velocidad de sus hombres de banda, decidiendo prescindir de un organizador puro. Gana desequilibrio, pero pierde manejo de balón.
– Lista en aumento –
Nueve ‘chamos’ de la Venezuela subcampeona del Mundial Sub-20, disputado del 20 de mayo al 11 de junio en Corea del Sur, están concentrados bajo las órdenes de Dudamel en el cierre de la eliminatoria.
Son el arquero Faríñez, los defensas Ronald Hernández y José Hernández, los mediocampistas Yangel Herrera, Ronaldo Lucena, Sergio Córdova, Yeferson Soteldo y Samuel Sosa y el delantero Ronaldo Chacón.
Faríñez, Córdova, Soteldo y, en su debut con la selección mayor, Ronaldo Lucena jugaron contra Uruguay, los dos primeros en el once inicial.
“Veo el futuro con mucho optimismo”, celebró Dudamel, al subrayar el crecimiento de esos jóvenes en el proceso de renovación de Venezuela con vistas a la clasificatoria a Catar-2022.
El póquer de Sub-20 del jueves ilustra esa evolución, con rápidos saltos al extranjero. Faríñez acaba de cerrar un acuerdo que lo llevará en enero del próximo año al colombiano Millonarios, Córdova juega en Alemania con el Augsburgo, Soteldo en Chile con el Huachipato y Lucena en Colombia con el Atlético Nacional.
Y el relevo no se limita a la generación del Mundial Sub-20.
La dupla de zagueros centrales usada por Dudamel ante Colombia, Argentina y Uruguay es un buen ejemplo: Jhon Chancellor (Delfín, Ecuador) tiene 25 años y Mikel Villanueva (Cádiz, España), 24. Cumplió frente a Cavani y Suárez, como lo hizo ante Falcao y Messi.
El futbolista de mayor edad que saltó a la cancha en el duelo contra los charrúas es Tomás Rincón, con 29 años, nexo entre la era de las figuras que han dicho adiós a su etapa vinotinto como Juan Arango, Oswaldo Vizcarrondo o Alejandro ‘El Lobo’ Guerra, y la de los muchachos que surgen.
El universo de convocables, en tanto, aumenta.
– “Hay que tener paciencia” –
La renovación promete. No obstante, harán falta goles para que la realidad vinotinto sea distinta cuando vuelva a salir a buscar su primera clasificación a la Copa del Mundo.
Venezuela es la única de las diez selecciones sudamericanas que nunca ha clasificado a un Mundial.
“Yo quiero ganar, como todos ustedes, pero hay que tener paciencia”, pide Dudamel frente al déficit por cubrir.
El seleccionado vinotinto cerrará la clasificatoria a Rusia-2018 el martes próximo ante Paraguay. ¿Será el momento de pagar la deuda y darse el gusto de ganar para despedirse con un nuevo resultado esperanzador?
Su rival se juega como local la posibilidad de entrar al Mundial.