El director general del FC Barcelona, Óscar Grau, reiteró este miércoles que el club azulgrana quiere seguir jugando en la Liga española, al tiempo que no espera un incremento de hostilidad en los estadios españoles por la delicada situación que se vive en Cataluña.
“Los presupuestos están confeccionados en base a participar en la Liga, pienso que la Liga y el Barça tienen que ir de la mano”, dijo Grau, en una rueda de prensa para presentar los resultados del ejercicio 2016/17 y los presupuestos para a la actual temporada.
Grau rechazó contestar a situaciones hipotéticas de supuesta independencia de Cataluña, insistiendo en que “la posición del Barcelona será seguir jugando las diferentes competiciones e intentar ganarlas, este es el objetivo por el que vamos a luchar esta temporada”.
Preguntado por la posición del Barcelona en la situación que se vive en esa región, Grau se remitió a la declaración institucional del presidente azulgrana Josep Maria Bartomeu pidiendo “un proceso de diálogo y negociación”, donde también aseguraba que el Barça quería seguir en la Liga.
“Me remito a la declaración institucional del presidente de la semana pasada en el que defendemos negociación, respeto y deporte”, dijo Grau.
Las respuestas del responsable azulgrana llegan al día siguiente de que el presidente catalán, Carles Puigdemont, aumentará la confusión en torno a la situación catalana, al dar la impresión de que declaraba la independencia para suspenderla unos segundos después en el Parlamento regional.
Preguntado por si una eventual independencia de Cataluña tendría un impacto sobre los patrocinadores del club, Grau se limitó a afirmar que “los patrocinadores están muy contentos de asociarse al Barça por quien es, por la estructura de club, por su estilo de juego, por su ADN, por los valores que transmite y yo pienso que es un activo que siempre mantendremos”.
Grau tampoco considera que la situación catalana vaya a suponer un eventual aumento de hostilidad en los campos españoles contra el Barcelona, a tres días de jugar el sábado en Liga en Madrid contra el Atlético.
“El Barcelona es el rival a batir y cuando vamos a los campos lo que piensan es en ganar a unos de los rivales más fuertes de la Liga y creo que no va a condicionar”, concluyó.