Es bien sabido que luego de tener sexo hay ciertos cuidados que deben tenerse en cuenta. Pero siempre es importante preguntarse ¿por qué son tan fundamentales? Y ¿Cómo impactan en la salud femenina?, para responder las preguntas, la doctora Sara Twogood, ginecóloga y asistente de obstetricia explicó las razones para tomar ciertas precauciones después del acto sexual.
Orinar es fundamental
Incluso aunque no existan ganas reales de orinar, es clave intentar hacerlo de todos modos porque el flujo de orina ayuda a eliminar las bacterias de la uretra. Las infecciones urinarias ocurren por ejemplo cuando las bacterias que normalmente viven en la vagina o el colon se empujan inadvertidamente en la uretra durante la actividad sexual.
Hacerlo es especialmente importante para una persona propensa a las infecciones urinarias. Pero aún en el caso de quienes no tienen problemas con este tipo de infección, también es necesario hacer pis después de una relación sexual.
Ten una toalla cerca
Se supone que el sexo es una actividad húmeda y desprolija: el semen, el sudor, el lubricante en algunos casos y los fluidos vaginales pueden dejar la zona íntima de la mujer completamente húmeda. Es por eso que es una buena idea agarrar una toalla o un poco de papel higiénico y limpiar ese exceso de humedad.
Evita la ropa interior
Para quienes prefieren quedarse en la cama durmiendo y no quieren dormir desnudos, pueden ponerse un pijama suelto con una tela que permita a tus zonas respirar, pero nunca la ropa interior. Se recomienda evitar la ropa interior que se estaba utilizando previamente, al menos hasta el otro día, para evitar una infección.
Atención a los cambios
No es necesario examinar en profundidad la zona y hacerse estudios después de cada encuentro sexual, pero conocer y prestar atención al cuerpo para poder evidenciar cambios puede hacer la diferencia en prevención de enfermedades, infecciones y molestias.
Más información en Infobae