El heredero de la corona saudí es el verdadero dueño de un cuadro de Leonardo Da Vinci subastado en noviembre por 450 millones de dólares, asegura hoy el diario The Wall Street Journal (WSJ).
EFE
La revelación se produce un día después de que The New York Times asegurara que quien compró el cuadro durante la subasta del 15 de noviembre en Nueva York fue otro príncipe saudí, Bader bin Abdalá bin Mohamed bin Farhan al Saud.
Pero, según el WSJ, el príncipe Bader actuó como apoderado representando al heredero de la corona saudí, Mohamed bin Salman, de acuerdo con fuentes de la inteligencia estadounidense y un experto en arte en Oriente Medio que conoce detalles de la operación.
El cuadro, “Salvator Mundi”, la única pieza de Da Vinci que queda en manos privadas, fue vendido por Christíe’s el 15 de noviembre pasado y alcanzó la cifra más alta lograda hasta ahora por una obra en una subasta de arte.
Una de las fuentes consultadas por el Journal sostiene que el príncipe Bader, un distante pariente del heredero de la corona saudí, fue el comprador nominal, pero “él es un apoderado de MBS”, las iniciales del príncipe Mohamed bin Salman.
“Es un hecho que esta venta se hizo a través de un representante”, agregó esa fuente, no identificada por el Journal.
Las fuentes insistieron en que aunque el nombre del príncipe Bader sea el que aparece en los documentos, el heredero de la corona saudí, de 32 años, es el dueño real de la obra.
Los dos príncipes saudíes se conocen y Bader ha colaborado con Mohamed bin Salman en otros negocios y actos de caridad, según el periódico.
El cuadro será expuesto próximamente en la apertura de una sucursal del Louvre en la ciudad emiratí de Abu Dabi.