La moneda virtual bitcóin irrumpe este domingo en el mercado de futuros estadounidense con su lanzamiento en la plataforma de Chicago CBOE, donde los primeros contratos de futuros comenzarán a ofrecerse esta noche y el primer día de operaciones será el lunes.
Además de a CBOE, la autoridad reguladora también ha dado luz verde al intercambio de futuros de bitcóin en el CME de Chicago, el mercado más grande de derivados del mundo, que comenzará el 18 de diciembre a ofrecer contratos, mientras que el índice Nasdaq ha anunciado su intención de seguir los mismos pasos en 2018.
El debut de la criptomoneda viene acompañado de un debate sobre si la gestión por parte de operadores profesionales e inversores institucionales contribuirá a su reconocimiento en los mercados o si su sonada volatilidad supondrá un peligro para ellos.
El bitcóin cotizaba a 996 dólares al empezar este año y su valor se ha disparado hasta rondar los 16.000 esta semana, con una escalada en los últimos días que los expertos atribuían a su inminente negociación en los mercados de futuros de EE.UU.
Para sus contratos, CBOE se basará en la plataforma Gemini, fundada por los hermanos Cameron y Tyler Winklevoss, conocidos por haber disputado con Mark Zuckerberg la idea original de Facebook y, más recientemente, por acumular más de mil millones de dólares en bitcoines.
Los futuros que negociará CBOE bajo el código XBT serán contratos liquidables en efectivo y tomarán como referencia el precio en dólares estadounidenses que se obtenga en las subastas que realiza Gemini, indica la plataforma en su página web.
Por su parte, el CME utilizará cuatro casas de intercambio (Bitstamp, GDAX, itBit y Kraken) para producir su índice de precios de bitcóin diario, aunque planea incluir otras en el futuro, indicó una portavoz a The Wall Street Journal (WSJ).
Las cinco plataformas en las que han depositado su confianza los dos mercados de futuros de Chicago han tomado medidas para ajustarse a las regulaciones y a las leyes contra el lavado de dinero, según el diario.
La moneda virtual creada en 2009, descentralizada y basada en la tecnología “blockchain”, ha despertado temores de que sus transacciones escondan operaciones de lavado de dinero o sirvan a países o personas objeto de sanciones económicas por EE.UU.
En cuanto a su salida al mercado, preocupa a los inversores que los precios de futuros del bitcóin no se fijen de manera correcta y sigan teniendo movimientos bruscos por su alta volatilidad, o que algunos agentes manipulen los mercados de entrega inmediata para repercutir en los de futuros.
En el caso de CBOE, su presidente y consejero delegado, Chris Concannon, aseguró estar “cómodo” con el sistema de subastas de Gemini, a pesar de que ha errado “varias veces” en los últimos meses, en fines de semana con poco volumen de transacciones o festivos, recoge el diario.
En este sentido, Cameron Winklevoss defendió los mecanismos de subasta de “eficacia probada” de su plataforma, cuyo acuerdo con la CBOE permite al mercado identificar a “agentes malignos” que intenten manipular esas subastas, añade el WSJ.
A raíz de la aprobación de esas negociaciones por parte de la autoridad estadounidense, la Comisión de Negociación de Futuros, tanto CBOE como CME se comprometieron a tomar medidas adicionales para evitar manipulaciones, pero a los inversores les queda la duda ante lo desconocido.
“Los grandes índices de capitalización muestran algo de volatilidad en las liquidaciones en efectivo y eso que hay alta liquidez y alta regulación”, indicó a CNBC el analista Steve Sosnick, de Interactive Brokers Group, quien añadió que en el caso del bitcóin hay “mucha más incertidumbre”.
EFE