Cometieron el mismo error del año 2005 con la no participación en las elecciones parlamentarias que le permitieron al gobierno controlar hasta hoy todos los poderes, a excepción de la legítima AN electa en Diciembre de 2015. Estamos enfrentando a un régimen totalitario, inepto, corrupto y represivo que está dispuesto a perpetuarse en el poder, pero si la oposición no se replantea la unidad con una estrategia de corto, mediano y largo plazo, con miras al rescate de la democracia, la economía, los servicios públicos y combatir la corrupción, no hay viabilidad política para avanzar Esto es fundamentalmente el proyecto país, rescatar las instituciones democráticas, la separación de poderes, respetar la propiedad privada para que haya inversión nacional y extranjera y poder reactivar el aparato productivo. Es esta y no otra la ruta a seguir, utilizar todos los canales democráticos que nos permite la constitución para enfrentar la dictadura castro chavista madurista. Ninguna oportunidad del voto debemos despreciar, la experiencia reciente es suficiente para no repetir esos errores.
La oposición debe entrar urgentemente en una sindéresis reflexiva con todos los factores opositores. De esta sindéresis debe salir la conclusión de la rebatiña presidencial de los que vienen aspirando desde hace unos años. Estimo que ninguno de los que han asomado sus opciones en esta irracional rebatiña, dada la gravedad de la crisis, debieran participar, más bien, deponer sus aspiraciones y trabajar todos en un outsider que pueda facilitar un reencuentro de los venezolanos opositores y sectores descontentos del chavismo. Debemos tener claro que viene una transición en la cual convivan opositores y el chavismo, particularmente el disidente y aún el no disidente defensor de la democracia. Pretender una transición destruyendo al adversario no es viable ni conveniente, es precisamente eso lo que hemos vivido en 18 años de autocracia chavista que siempre ha desconocido, descalificado y perseguido al adversario.
El último error de los partidos más grandes de la oposición: PJ, AD, VP fue significativo para que el gobierno se quedara con el 90% de las alcaldías. Es claro que la militancia de los venezolanos en partidos políticos no llega al 20% de la población, paro hay que tomar en cuenta que muchos no militantes son simpatizantes de una u otra tendencia política. Es más, hay que tomar en cuenta que los partidos políticos son los que cuentan con maquinarias organizativas que les permites constituir los testigos de mesas, sin los cuales no es posible ganar elecciones. A este respecto es de apuntar que en las elecciones regionales del 15 de Octubre, la oposición tenía menos del 60% de los testigos y en la municipales por la cuantiosa división, contaron con menos del 30% de los testigos. Esto aunado a la campaña abstencionista de grupos opositores y, por supuesto el ventajismo oficialista y un CNE parcializado, fueron factores decisivos en la imposición del gobierno con el 90% de las alcaldías.
A sentarse, señores líderes de todos los factores democráticos sin excepción, no importa el tamaño, todos somos necesarios, a sentarse en una sindéresis de meas culpas y retomar el camino de la unidad. No seguir con escarceos de unos contra otros, tratando de diferenciarse del resto como si no hubiesen cometido errores, unos más, otros menos, por favor, hay que tener un mínimo de humildad y reconocer que en una forma u otra nos hemos equivocado y, en conjunto de esas equivocaciones, ha salida fortalecida la dictadura. O escarmentamos o seguirá la dictadura castro chavista madurista con su decrépito y destructor socialismo del siglo XXI que nos ha llevado a la más grave crisis económica, social y política de nuestra historia republicana. La lucha continúa sin renunciar nunca a nuestro derecho al voto, muy a pesar de tantas adversidades que todos conocemos.
*Economista, profesor titular de Luz, Miembro de Venezuela Positiva