Cuenta una leyenda que hace miles de años llegaron a la tierra cientos de almas con la misión de sanar y expandir la conciencia amorosa en el planeta. Y aunque nacieron en diversos lugares del mundo, sus almas se conectaron a través de su vibración en común. Cada vivencia en cada uno de estos seres, impactaba al otro sin ni siquiera conocerse en este plano.
Cada uno inició un ciclo de vidas en la tierra, algunas de estas almas se encontraban y cada vez que esto sucedía la misión se reactivaba en ellos y en nuevo impulso crecía en el grupo de sanadores sin saberlo, todos seguían conectados.
Estas almas voluntarias llegarían de diversas partes del universo, la misión era estar encarnados en la tierra para generar una vibración de alto nivel, en el momento en que se daría la ascensión del planeta, y guiar esa vibración para conectarse con sus puntos de origen en el universo. De esta manera cualidades de estas otras esferas del universo como el amor, la compasión, la paz, la sabiduría, la salud, la abundancia, la fe, las artes y la tecnología del bienestar, llegarían a través de la distancia de miles de soles.
Muchos de estos maestros están perdidos, y decidieron olvidar su misión ya que al llegar a la tierra y entrar en la rueda del karma planetario, fueron atrapados ante el sufrimiento.
Para algunos encarnar, no fue grato abandonar sus cuerpos sutiles y entrar en la densidad del tercer plano, ya que casi los hace perder la cabeza. De alguna manera olvidar, fue la única manera de mantenerse cuerdos en la reencarnación tras reencarnación, hasta que llegara el momento correcto para recordar.
Ha llegado el momento para muchos de ellos, y desde cualquier parte del mundo donde estén un llamado interno desde sus corazones está encendiéndose y reconectándolos a su origen. Recordar es necesario, cada vez que uno de ellos lo hace, activa su conexión de origen, y todo el grupo sube un escalón.
Dentro de la leyenda también se cuenta que de tanto dolor, algunos de estos maestros no solo decidieron olvidar sino tomaron la venganza y el odio en sus corazones, y ahora se encuentran atrapados en la oscuridad. Pero aun en ese caso es perfecto lo ocurrido, ellos al encender su verdadera conexión llevarán más luz aun que otros, a espacios que están ocultos y no vistos. Puede que estos sean los maestros más amorosos de todos, porque se ofrecieron a entrar donde nadie más se atrevía. Era el plan para ellos.
No esperen verlos como santos o budas. Están en el mundo viviendo, pagando la renta trabajando.
Esperando una señal, buscando qué hay de diferente en ellos y por qué?
La búsqueda ha empezado…y estos maestros perdidos empiezan a reconocerse, su historia la dejaré en estas líneas…
Cristina Carbonell
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