La nueva oferta de Lufthansa indigna a familiares del accidente de Germanwings

La nueva oferta de Lufthansa indigna a familiares del accidente de Germanwings

En la imagen, una cinta de la aerolínea alemana Germanwings en una puerta del aeropuerto Berlin Tegel.

 

Los familiares de las víctimas de la tragedia aérea de Germanwings han reaccionado con indignación a una oferta de la matriz Lufthansa de seguir pagando sus terapias si renuncian a emprender querellas judiciales y a retirar las ya presentadas, ha explicado a DPA un los familiares, Elmar Giemulla, publicó EuropaPress.





Giemulla, que representa a más de 200 familiares, ha revelado que varios clientes recibieron la oferta de Lufthansa y reaccionaron irritados.

El 24 de marzo de 2015, un avión de la subsidiaria de Lufthansa se estrelló contra en los Alpes franceses cuando realizaba un vuelo de rutina entre Barcelona y la ciudad alemana de Duesseldorf con 150 personas a bordo, la mayoría españolas y alemanas.

“No dejaré que me traten de esta forma”, citaba el sábado el diario ‘Bild’ a una alemana de la ciudad de Krefeld que perdió a su hermano y a una sobrina en el accidente. Giemulla indicó que ninguno de sus clientes firmó la declaración renunciando a acciones judiciales.

Lufthansa, por su parte, subraya que en un comunicado en la actualidad sufraga de forma voluntaria gastos de los familiares para ciertas prestaciones como terapias. “De esta forma, Germanwings y Lufthansa brindan ayuda más allá de lo que dicta la ley”, indica.

“Desgraciadamente, estos beneficios voluntarios fueron utilizados por algunos abogados para emprender acciones legales contra empresas del grupo Lufthansa. Por estos motivos podremos mantener estas ofertas voluntarias solo si estas prestaciones no son empleadas como recurso contra nosotros”, explica el comunicado.

Giemulla presentó demandas civiles en nombre de casi 200 clientes ante el Tribunal Regional de Essen a fin de obtener mayores indemnizaciones. Lufthansa pagó 25.000 euros por cada víctima y los familiares cercanos recibieron 10.000 euros por persona. Los querellantes demandan otros 25.000 euros más por víctima y 20.000 euros adicionales para cada pariente cercano.

Según la investigación, el copiloto Andreas Lubitz, de 27 años, estrelló el avión contra la montaña de manera intencionada. Además, pesquisas realizadas revelaron que, antes de la catástrofe, el copiloto padecía serios problemas de visión y depresiones, pese a los cuales le habían renovado su permiso de aviación.