A pocas horas de terminar el año 2017, Caracas presenta una cara donde las protestas por hambre, toneladas de basura y calles oscuras son el escenario con que los ciudadanos recibirán el 2018, ante esta realidad la respuesta de la Alcaldía de Libertador es la destinación de una suma exorbitante de dinero para realizar un mega concierto este 31 de diciembre con artistas internacionales y nacionales. Asimismo los vecinos revelaron que también derrocharon un dineral en la compra de adornos de navidad para toda la ciudad, los cuales en recorridos por la misma brillan por su ausencia.
Nota de prensa
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, develó que a través de cuatro créditos adicionales el Concejo Municipal de Libertador le aprobó a la recién electa alcaldesa Erika Farías la cifra descomunal de Bs 24.062.667.334 para un denominado Plan Navidades Felices en la ciudad, algo que en la situación de crisis que vive el pueblo los consideran un insulto. “Solo para el concierto de fin año en la Plaza Bolívar destinaron la millonada de 12.506.000.000 para montar la rumba con participación de artistas nacionales e internaciones, esto sin contar el presupuesto oculto en dólares para pagarles a estos cantantes. Cifras que aún no han sido presentadas públicamente a los caraqueños”, dijo.
Rojas señaló que mientras en Plaza Bolívar unos pocos rumbearan en las cercanías tanto en barrios como urbanizaciones los caraqueños tendrán una mesa sin cena fin de año y los sentimientos presentes serán dolor y rabia. “Gastarse esté dineral en un concierto mientras en la parroquias populares como Catia, Antímano o La Vega el pueblo está protestando clamando comida es una ofensa total, aún a pocas horas del 31 de diciembre hay miles de caraqueños que pagaron su Clap navideño y no les ha llegado. Aquí hay un mesa guiso de corrupción encabezado por Freddy Bernal que se cimienta en la burla al pueblo”.
El miembro de la Asamblea de Ciudadanos de Candelaria, reveló que también destinaron otra millonada que alcanza la cifra de Bs 11.556.667.334,83 para la compra de adornos navideños a lo largo y ancho de toda Caracas, cuando la realidad es que no hay decoración alguna colocada en ninguna parroquia de Libertador. “Aunque podría ser que la alcaldesa Erika Farías considere las montañas de basura amontonadas con el pendón de su cara en cada esquina como arbolitos de navidad”, ironizó.
Informó que para este 31 de diciembre a la medianoche están convocando a un gran cacerolazo por el hambre y contra el Gobierno de Nicolás Maduro, ya que al no tener nada que comer en esta cena tan especial solo les queda las ollas vacías para expresar su malestar. “Hemos estado monitoreando y acompañando al pueblo en su protestas por comida, reunido con dirigentes sociales de diferentes parroquias tratando de transformar ese posible estallido social en una verdadera rebelión popular”.
“No es por el pernil”
Por su parte Julio Reyes, dirigente social de Catia, develó que están protestando juntos opositores y oficialistas por la vida de sus familias, la cual depende del acceso a alimentos subsidiados. “Para nadie es un secreto el alto costo de los alimentos fuera de la “extorsión del estado” con los CLAP, para los sectores populares es impagable un kilo de harina Pan. Y cuando lo hacen es, porque o hubo un rebusque o tuvo que sacrificar otro rubro, esa es la verdad”, destacó.
Reyes expresó que no quieren una mega rumba sino obtener la comida para sus familias, ya que muchas veces esos alimentos pasan por las manos de los colectivos bachaqueros que son los que dominan las ventas de comidas. “La gente está clara de quién juega con el hambre de los ciudadanos, no es un secreto que quiénes manejan los grandes negocios con la comida, es la propia dirigencia media del PSUV (concejales y diputados) y unos que otros vivos criollos de alguna UBCH”.