El papa Francisco se bajó hoy del papamóvil en uno de los trayectos por las calles de Trujillo, en Perú, para saludar a Trinidad, una mujer que llevaba un cártel que decía que cumplía 99 años y que estaba ciega y que quería tocar su mano.
“Me llamo Trinidad cumplo 99 años. No veo. Quiero tocar tu manito”, se leía en el cártel que una persona levantaba con el deseo de la anciana en espera de que lo viese el papa a su paso por las calles de Trujillo.
El portavoz del Vaticano, Greg Burke, explicó que Francisco vio a la anciana mandó parar el vehículo para bendecirla en el día de su cumpleaños.
En varias ocasiones durante sus viajes, el pontífice ha hecho que se detuviese el papamóvil después de ver a personas que le pedían una bendición o un saludo.