La mayor tempestad de nieve jamás registrada perturbaba fuertemente la vida cotidiana de Moscú, donde se registraba este lunes una temperatura de 13 grados bajo cero y numerosos embotellamientos.
Los aeropuertos de la capital rusa tuvieron que anular debido a la nieve un centenar de vuelos.
“Es la primera vez en cien años que tuvimos tanta nieve. La intensidad de las nevadas, los cambios meteorológicos con lluvia, nieve y heladas complican el trabajo de los empleados viales”, declaró el vicealcalde de Moscú, Piotr Biriukov.
Este lunes podrían caer 23 centímetros de nieve, advirtieron las autoridades, que exhortaron a los moscovitas a no circular en automóvil y cerraron las escuelas.
El domingo cayeron 43 centímetros de nieve, más de la mitad de lo que cae de media en la ciudad en un mes, según el Servicio Nacional de Meteorología.
Una persona murió el domingo y otras fueron heridas por las caídas de los árboles bajo el peso de la nieve.
Cerca de 70.000 agentes del ayuntamiento fueron movilizados para despejar las carreteras.
Por otra parte, el lunes 780 personas fueron socorridas en el centro de Rusia tras haber quedado atrapadas en sus vehículos sepultados por la nieve. AFP