Triptease adelanta las tendencias que influirán en 2018 en la mente viajera de los consumidores. De algunas de las adelantadas por los marcadores de tendencias ya se ha oído hablar, como el auge del turismo de salud, escapadas más largas, protagonizadas especialmente por los babyboomers, y el turismo sostenible, que mantendrán su popularidad. Pero otras han llamado la atención de Triptease, sobre todo por su potencial para ser capitalizadas por los hoteles. He aquí su selección.
Viajes basados en logros
Enero es la época del año en que todo el mundo se plantea grandes objetivos para mantenerse en forma y saludable; y un mes después cada vez más gente se compromete por más tiempo e incluso diseña sus planes de viaje en torno a retos físicos y mentales.
Las OTA han descubierto la oportunidad. Por ejemplo, en Nueva York el pasado mes de noviembre los datos de Triptease mostraron un alza en su actividad de fijación de precios en torno a la semana del maratón, por lo que recomiendan que los hoteles participen también en estas iniciativas. En este sentido sugieren crear paquetes con un maratón local u otro evento como protagonistas, e incluso convertirse en el proveedor oficial de alojamiento de la carrera a través de un acuerdo de colaboración con sus promotores. O incluso, con la ayuda de expertos en este ámbito, organizar incluso su propia carrera o prueba que pueda atraer a los viajeros en busca de retos.
Con las manos en el lujo
Desde Triptease admiten haber tomado prestada esta tendencia de Small Luxury Hotels of the World (SLH). A medida que se mantiene en pleno apogeo el cambio a dejar a un lado las propiedades y dar prioridad en su lugar a las experiencias, SLHespera que los hoteles que puedan ofrecer algo radicalmente diferente de la normaprosperen. Los clientes, aseguran en el grupo, no tendrán miedo de ensuciarse las manos y ‘trabajar’ en sus vacaciones, ya sea para obtener su propia cena o crear la fragancia para perfumar su suite, como ya hacen en el Hotel Magna Pars Suites de Milán.
En el Hotel Magna Pars Suites de Milán, ubicado en una antigua fábrica de perfumes, los huéspedes crean su propio aroma para perfumar su habitación.
Así que desde Triptease aconsejan al hotelero asegurarse de aprovechar al máximo el legado del establecimiento y su localización. El de Milán ya citado, por ejemplo, se ubica en una antigua fábrica de perfumes. La compañía plantea con qué características únicas (y objetivo ideal de Instagram) puede jugar el hotel. La comida y la bebida suelen funcionar bien, por lo que el establecimiento puede encontrar un chef con talento al que le guste mezclarse con los clientes, para crear así una experiencia gastronómica única.
El gran apagón
La palabra ‘remoto’ aparece cada vez más en el mercado turístico estos días. Airbnb, por ejemplo, afirma que las reservas en cabañas en medio de la naturaleza están creciendo un 700% y Booking.com informa de que el 25% de los viajeros quiere visitar un destino remoto o desafiante al año.
Por supuesto es un poco difícil para muchos hoteles ya existentes decirles que de repente sean más remotos. Pero aún es posible alimentar esta tendencia de alguna manera, aunque sea pequeña. Triptease propone así designar partes del hotel como ‘zonas tranquilas’, donde los clientes que no quieran ser molestados por el sonido de los móviles puedan encontrar su santuario. O investigar qué excursiones pueden ofrecer en los alrededores a aquellos que buscan aunque sólo sea una escapada temporal de la vida moderna.