El grupo Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) señaló este miércoles que la criptomoneda impulsada por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, es una herramienta para “lavar el dinero proveniente del narcotráfico y la corrupción”.
EFE
La puesta en circulación de la denominada “moneda Petro convertible” es, en opinión de Veppex, con sede en Miami (Florida), una “manera de tratar de evadir sanciones económicas y el seguimiento que se hace al dinero producto del tráfico de drogas”.
Este martes, Maduro ordenó que la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) hiciese un porcentaje de sus compraventas de productos con “moneda Petro convertible”, la criptomoneda nacional cuya preventa arrancó poco después de la medianoche del lunes pasado.
El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, ha declarado nulo el decreto de la emisión del Petro pues, asegura, se trata de una moneda “ilegal” que viola lo establecido en la Constitución.
Veppex llamó en un comunicado a la comunidad internacional a “no reconocer el Petro y a prohibir transacciones con ella en sus territorios”.
Las criptomonedas, agregó el grupo de exiliados, se fundamentan en la confianza y “eso es precisamente lo que menos genera el régimen de Maduro” por sus “prácticas antidemocráticas, reiterada violación de los derechos humanos de los venezolanos, la corrupción y el tráfico de drogas como política de estado”.