Cinco personas murieron y otras cinco resultaron heridas en una explosión de un edificio el domingo en Leicester, en el centro de Inglaterra, cuyo causa se desconoce pero se descarta el móvil terrorista, informó este lunes la policía.
Tras dar inicialmente un balance de cuatro muertos, un portavoz de la policía lo revisó al alza: “desgraciadamente, en las últimas horas, el número de personas halladas muertas en el edificio derrumbado aumentó a cinco”.
También el balance de heridos pasó de 4 a 5, uno de ellos en condición grave.
La policía explicó que siguen buscando a víctimas entre los escombros, pero las tareas de rescate tuvieron que suspenderse momentáneamente por temor a los daños estructurales en un edificio vecino.
“Podrían pasar algunos días hasta que establezcamos la causa probable de la explosión”, dijo Matt Cane, del servicio de bomberos y rescate del condado de Leicestershire.
La explosión se produjo en un edificio formado por un local comercial y una vivienda de dos pisos.
Los vecinos explicaron que sus casas temblaron por la fuerza de la explosión, que provocó un incendio que devoró la tienda que estaba en los bajos del edificio y los dos pisos superiores.
“Una vez que el lugar se considere seguro”, dijo el comisario de policía Shane O’Neill, los servicios de emergencia “empezarán a examinar las circunstancias que rodearon al incidente, que, en este estadio, no se relacionan con terrorismo”.
Los bomberos trabajaron toda la noche para controlar el incendio tras el incidente, que ocurrió a las 19H00 (locales y GMT).
“Dio mucho miedo”, dijo a la AFP un vecino, Graeme Hudson.
“Vivo a cinco minutos, pero mi casa tembló. Salí y vi mucho humo y grandes llamas”, añadió. AFP