El reciente lanzamiento con bombos y platillos de la supuesta criptomoneda Petro por parte del gobierno nacional fue duramente repudiado por la oposición de izquierda y el sector del sindicalismo petrolero que defiende la independencia de clase.
Nota de prensa
José Bodas, secretario general de la Futpv y dirigente nacional de la Corriente Clasista, Unitaria, Revolucionaria y Autónoma (C-cura), aclaró que se trata de un nuevo mecanismo de endeudamiento. “Como ya muchos saben, no se trata de una moneda electrónica sino de un nuevo bono de deuda pública. El gobierno en vez de dejar de pagar la odiosa, fraudulenta e ilegal deuda externa, sigue pagando hasta el último dólar a costa de hambrear al pueblo recortando las importaciones de alimentos y seguir emitiendo nueva deuda. Los recursos que se capten con el bono llamado Petro no se usarán para atender la crisis social, van a ser para pagarle deudas a los buitres financieros yanquis, como el pago de 90 millones de dólares por servicios de deuda de Pdvsa el 23 de febrero pasado al banco Goldman Sachs”, denunció el dirigente petrolero.
Considera Bodas, quien también es dirigente del Partido Socialismo y Libertad (PSL) que estamos ante un mecanismo de endeudamiento profundamente entreguista y reaccionario, pues “se trata de un nuevo ataque alevoso del gobierno contra la soberanía sobre los recursos naturales, al respaldar la emisión de deuda con los yacimiento petrolíferos está hipotecando unas riquezas que de acuerdo con la Constitución son del Estado venezolano y no se pueden privatizar ni hipotecar. Ya el gobierno ha venido avanzando en la desnacionalización del petróleo al crear las empresas mixtas con transnacionales del imperialismo yanqui y europeo, y de países como China y Rusia, permitiéndole a esas transnacionales declarar como parte de sus activos el porcentaje de los yacimientos que estiman extraer en 35 o 40 años de concesiones. También con las ventas a futuro de petróleo. Con el Petro se da un paso más en la dirección del entreguismo más aberrante”.
Bodas considera particularmente peligroso que se pretenda pagar las prestaciones sociales con los bonos Petro o que el gobierno confisque las cajas de ahorros de los trabajadores ofreciendo a cambio los mismos bonos de deuda. “Ya tuvimos en los gobiernos del puntofijismo la pésima experiencia del pago de prestaciones y pasivos laborales con bonos de deuda pública que muchas veces los trabajadores tuvimos que vender en condiciones desventajosas. En el caso del Petro, dada la terrible crisis que ha generado el gobierno con su ajuste inflacionario, el resultado va a ser mil veces peor. Advertimos que el intento de pagar pasivos laborales con el Petro es un nuevo ataque a nuestros derechos. La única salida está en seguir profundizando la movilización de los trabajadores por salarios dignos, como vienen haciendo los petroleros, los trabajadores de la salud, los cementeros y los eléctricos en el oriente y otras partes del país, hasta que le doblemos el brazo al gobierno antiobrero”, concluyó.