Pocos meses antes de la matanza de Parkland en la que un exalumno quitó la vida a 17 personas este año, el dueño de una armería de Florida se negó a venderle un rifle AR-15, pero finalmente lo adquirió en otra tienda, informó este miércoles un medio local.
El dueño de la armería Coconut Creek Pawn & Guns, ubicada en Coconut Creek, en la costa sureste de Florida, se negó a vender a Nikolas Cruz, el autor confeso del tiroteo, un rifle semiautomático porque la edad no le pareció la apropiada, recogió el canal Local 10 News.
En una entrevista en exclusiva con el citado medio, Riz, el propietario de la armería, quien prefirió no revelar su apellido, dijo que la primera pregunta que le formuló a Cruz, de 19 años, fue qué edad tenía.
El autor de la matanza en el instituto de secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland (condado de Broward) le respondió que era mayor de 18 años.
A continuación, Riz le preguntó “si era menor de 21 años”, a lo que el chico respondió que sí; pero, aún así, el dueño de la tienda decidió no venderle el rifle.
“Yo no vendo armas de fuego a personas menores de 21 años”, subrayó Riz, quien describió a Cruz como “frío, tranquilo, para nada nervioso” cuando intentó efectuar la compra del rifle en su tienda y persuadirle de que se le vendiese el arma.
En Florida está permitida la venta de rifles a personas mayores de 18 años, una normativa que quiere endurecer el gobernador del estado, Rick Scott, con el aumento de edad de acceso a armas a los 21 años.
Razi explicó que su política sobre la venta de armas puede traerle menos negocio, pero que mantendrá su decisión. “Realmente tengo escalofríos por la espalda”, es decir, gracias a Dios que no le vendí a este monstruo un arma”, subrayó.
Pero Cruz no desistió y compró el AR-15 legalmente en Sunrise Tactical Supply, una tienda de armas ubicada en un centro comercial de Coral Springs, en el sur de Florida, con el que perpetró el tiroteo el pasado 14 de febrero.
Esta tienda, cuyos armeros habían sido despojados de rifles y otras armas tras conocerse que fue allí donde Cruz adquirió el rifle, “permanecerá cerrada indefinidamente”, había indicado a mediados de febrero pasado a los medios un abogado de los propietarios.
Los dueños de la tienda de armas realizaron todo el protocolo de seguridad exigido en la venta del rifle a Cruz: el joven cumplimentó todos los formularios de compra requeridos por el Departamento de Justicia, que incluye una copia de su carné de conducir y respuestas a un cuestionario sobre enfermedades mentales.
Cruz está detenido en una cárcel de este condado desde el mismo día del ataque tras confesar a sus captores que él fue el responsable del tiroteo en la secundaria de la que había sido expulsado el año pasado por motivos disciplinarios.
Afronta 17 cargos criminales por homicidio premeditado y, de ser hallado culpable, podría ser condenado a la pena de muerte. Su defensa ha adelantado que el responsable de la matanza está dispuesto a declararse culpable a cambio de que la Fiscalía desestime la pena de muerte.
EFE