Investigar la corrupción es una labor peligrosa, más aún si se realiza en un país como Venezuela que dejó de ser una de las democracias mas avanzadas de Latinoamérica para convertirse en una dictadura.
Por eso tiene mucho mérito lo que hacen las organizaciones no gubernamentales que defienden los derechos humanos y la transparencia en la gestión pública. Nuestro reconocimiento a las mujeres y hombres que integran Foro Penal, Provea, Observatorio Venezolano de Violencia, Ipys, Espacio Abierto, Observatorio Venezolano de Prisiones, Paz Activa, Transparencia Venezuela y Control Ciudadano, entre otras. Sin su constante labor de investigación, formación y divulgación los venezolanos estaríamos aún más desinformados y desprotegidos.
Control Ciudadano, la organización civil especializada en temas militares que dirige Rocío San Miguel, publicó un excelente trabajo sobre los militares responsables de la importación, distribución y venta de artículos de primera necesidad. Según el mismo, más de 500 militares han sido responsables del control de alimentos, medicinas y otros artículos básicos desde 2016 cuando Maduro creó la Gran Misión Abastecimiento Soberano (GMAS).
La investigación evidencia, una vez más, el gran fracaso de los militares al frente de tareas de civiles. Con un promedio de 24 nombramientos mensuales en 21 meses, la GMAS no solo no ha solucionado el problema de abastecimiento, sino que lo ha agravado, inclusive para la misma FAN que es incapaz de alimentar apropiadamente a sus efectivos.
El sistema político-económico trasnochado y fracasado que se ha intentado instaurar en Venezuela acabó con 8 mil industrias. Hoy en día prácticamente no producimos nada. Dependemos totalmente de las importaciones. Vistos los multimillonarios fraudes realizados alrededor del otorgamiento de divisas preferenciales para importar, es evidente que una cosa llevó a la otra y no por casualidad: Se destruyó el aparato productivo porque para la élite corrupta que gobierna resulta mejor “negocio” importar que producir.
Es urgente un cambio político para darle plena vigencia a la Constitución y que se le devuelva a la FAN el rol de una institución al servicio de todos los venezolanos y no de los intereses de una parcialidad política. Por ello es indispensable movilizarnos de frente y en todos los frentes para la realización de unas verdaderas elecciones presidenciales con todas las garantías a finales de 2018.
Unidad, resistencia y perseverancia para lograr el cambio!