Así como la Junta Patriótica que enfrentó a Pérez Jiménez se negó a participar en el plebiscito fraudulento de diciembre de 1957, desencadenando las protestas y acontecimientos que concluyeron el 23 de enero del 58; las organizaciones, sectores sociales y partidos democráticos de Venezuela hemos decidido desconocer la estafa del 20M, como un paso fundamental para lograr la libertad, el cambio y la prosperidad en Venezuela.
Ya hemos logrado que la gran mayoría de nuestro pueblo y de los países del mundo rechacen la farsa del 20M, pero sabemos que aún existen venezolanos de buena voluntad que tienen dudas sobre qué hacer ese día. La única decisión coherente que podemos tomar quienes queremos salir de esta crisis, es NO participar.
Ante esa realidad queremos afirmar con plena convicción que:
• El 20M es una farsa y NO debemos participar en ella.
• Bajo cualquier circunstancia el CNE anunciará un resultado previamente acordado, irrespetando la voluntad del pueblo.
•Participar el 20M, creyendo de buena fe que el árbitro electoral respetará la decisión de las mayorías, fortalece el plan de Maduro de legitimarse sin pueblo.
•Dejar sólo a Maduro en su estafa debilita a la dictadura y acelera su salida.
•El 20M no producirá el cambio anhelado por los venezolanos. Por el contrario, aumentará el hambre y la crisis humanitaria.
En función de ello, queremos comunicar al país 5 razones por las cuales estamos convencidos de esta postura:
1.- Toda la Venezuela Democrática, así como la Comunidad Internacional estamos desconociendo la farsa del 20M, mientras que sólo Maduro y sus aliados –quienes pretenden dividir y hacer el juego a la dictadura– quieren que seamos parte de ella.
•En Venezuela, las Iglesias Católica y Evangélica, universidades, estudiantes, sindicatos, empresarios, gremios, partidos políticos, líderes de la oposición, organizaciones no gubernamentales y diversos movimientos del chavismo democrático, entre otros, nos hemos unido contra el fraude y a favor de que se convoquen elecciones democráticas, libres y competitivas.
•La Comunidad Internacional ha desconocido previamente esta trampa y tanto la ONU como la OEA y la Unión Europea se negaron a validar el fraude y los resultados del 20M. Sólo Zapatero se ha prestado para intentar validar esta farsa.
2. Las condiciones electorales actuales son deplorables y han empeorado en relación a procesos anteriores.
•CNE en manos del PSUV.
•Violación de todos los plazos constitucionales y legales y ausencia de auditorías confiables.
•Imposibilidad de la Observación Internacional imparcial.
•Imposibilidad del cambio de residencia de millones de electores que han salido del país y negativa de inscripción de nuevos electores, así como vicios en el registro electoral.
•Inhabilitación de partidos políticos y negativa a registro de nuevas organizaciones.
•Inhabilitación, encarcelamiento y persecución de posibles candidatos presidenciales.
•Manipulación de actas en elecciones regionales de 2017.
•Eliminación de la tinta indeleble.
•Militancia en el PSUV de funcionarios electorales nacionales, estadales, municipales, coordinadores de centros de votación y miembros de mesa.
•Abusos del Plan República.
•Ventajismo y censura en los medios de comunicación.
•Mecanismos de extorsión, chantaje y terror al pueblo con instrumentos como el carnet de la patria, las cajas Clap, los bonos discrecionales y los puntos rojos.
Con estas condiciones, participar es contribuir con la farsa.
3. El objetivo de Maduro con la farsa del 20M es tratar de engañar y hacer creer a la comunidad internacional, a la Fuerza Armada y al pueblo que aquí hay democracia y que fue “reelecto limpiamente”, renovando su legitimidad de origen. Con ello, quisiera lograr que baje la presión nacional e internacional que lo aísla.
4. La oposición venezolana no presentó candidatos.
•Los que participan con Maduro en la farsa del 20M, entre otros Henry Falcón y Javier Bertucci, están fuera de la unidad superior de los patriotas y demócratas venezolanos, y tienen el plan, al reconocer los falsos resultados, de convertirse en una oposición colaboracionista que sea reconocida por el régimen, para que éste proceda a ilegalizar y perseguir a toda la sociedad democrática.
5. Con la farsa del 20M, Maduro pierde la legitimidad de origen.
• Ya perdida la legitimidad de desempeño por el evidente fracaso de su gestión, solo resta que pierda la legitimidad de origen, lo cual ocurrirá con la farsa del 20M, con lo que aumentará la presión popular, nacional e internacional, haciendo insostenible la permanencia fraudulenta del régimen.
• A partir del 21M comienza la lucha por verdaderas elecciones y es nuestro deber como ciudadanos acompañar esa lucha. Por esto y más, desde el Frente Amplio Venezuela Libre, reafirmamos que lo convocado para el 20 de mayo es una farsa a la que debemos
desconocer y desobedecer.
Y debemos hacerlo asumiendo nuestro derecho a NO convalidarla.Evidenciar el carácter dictatorial y autoritario del régimen, aumenta sus divisiones y presiones internas y externas, así como la movilización popular en el marco de nuestros derechos democráticos, logrando así que se vea forzado a respetar el derecho del pueblo a expresar en libertad su voluntad.
La dignidad del pueblo venezolano hará posible superar esta crisis, lograr la reconciliación y alcanzar una patria libre y democrática, de progreso y bienestar social.