La situación de Venezuela centró las conversaciones del canciller británico, Boris Johnson, con su homólogo chileno Roberto Ampuero en Santiago, al final de una gira que lo ha llevado a Perú y Argentina para buscar nuevos mercados después de que se haga efectivo el Brexit, reseñó AFP.
“Lo que ocurre (en Venezuela) es muy triste”, dijo Johnson en una conferencia de prensa junto Ampuero. “Es lamentable que las elecciones hayan sido fraudulentas, un montaje, y compartimos la voz que Chile está expresando en este sentido”, sostuvo.
A Johnson le ha “conmovido mucho” la “profunda emoción y cómo impacta a todos los países de la región ese sentimiento de ver que hay una crisis en Venezuela y que la comunidad tiene que unirse y hacer presión para que las cosas cambien”.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, renovó su mandato el pasado domingo en unos comicios boicoteados por la mayor parte de la oposición por falta de garantías democráticas y que han sido desconocidos por gran parte de la comunidad internacional.
El Grupo de Lima, que engloba a 14 países de la región, entre ellos Chile, decidió el pasado lunes reducir el nivel de representación diplomática en Caracas.
Chile anunció en este sentido que no nombrará nuevo embajador en el país petrolero, que atraviesa una de las peores crisis económicas y sociales de su historia y que está empujando a una masiva ola emigratoria hacia los países de la región.
“Lo importante es subrayar que Chile actúa en concordancia y en consonancia con otros países que comparten la misma sensibilidad”, dijo Ampuero, antes de precisar que “degradar el nivel de las relaciones diplomáticas con Venezuela no significa que cerremos la embajada”.
“Invitamos al Reino Unido a examinar las posibilidades de que incremente y haga valer sus buenos oficios en la región para que el tema de Venezuela sea resuelto dentro del marco político, diplomático y la vía negociada. Que la solución pase por el diálogo entre el poder y la oposición”, agregó el canciller chileno.
Negociaciones comerciales
Más allá de Venezuela, la visita del jefe de la diplomacia británica a Latinoamérica busca ahondar las relaciones con esta región cuando se consume la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
En este sentido, Johnson aseguró que quiere negociar con Chile un acuerdo de libre comercio (TLC), pero Ampuero le advirtió que “las relaciones comerciales y económicas que desarrollemos” deberán tener un “piso mínimo” equiparable al alcanzado con la UE.
Asimismo, Johnson, que fue recibido también por el presidente chileno, Sebastián Piñera, espera que Chile sirva de “puente” para acercarse a la Alianza del Pacífico (Chile Colombia, México y Perú) y a la región.
Con el 200 aniversario de la fundación de la Armada chilena por el almirante inglés Lord Cochrane como telón de fondo, las relaciones entre los dos países tienen una larga historia. En Chile abundan los apellidos anglosajones. No en vano, es el país latinoamericano con la mayor comunidad de origen británico (más de 400.000), lo que prácticamente se duplica si se incluyen los descendientes de irlandeses.
El canciller británico inaugurará junto con el ministro de Economía chileno el Hospital de Santiago Bupa, que con 400 camas es la clínica más grande de la empresa británica Bupa, la mayor inversora en el sector de la salud en Chile.
Asimismo, Johnson lanzará un proyecto del British Council para fomentar la educación digital y la programación, en particular entre las niñas de Chile, Colombia y Perú, que se enmarca en su prioridad personal de mejorar la educación de las niñas en el mundo.